Por Rafael Briceño

CHETUMAL, MX. – A seis años de la construcción de la casa del Universitario indígena, la representante del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI), Venancia Coh Chuc confirmó que no hay recursos para la rehabilitación del inmueble y por consiguiente ni fecha para ponerlo en funcionamiento.

Venancia Coh Chuc.

Recordó que el INPI invirtió una fuerte cantidad para la construcción del edifico pero que lamentablemente nunca operó “por lo que es importante encontrar los mecanismos para que funcione en beneficio de estudiantes indígenas. La casa del Universitario indígena se construyó para un fin y no puede perderse ese objetivo”, señaló.

Sin embargo, reconoció que en estos momentos no hay recursos para la rehabilitación del area de comedor así como del sistema eléctrico e hidráulico y el edificio qué ha sido vandalizado durante estos años.

“Es algo que no cuesta dos pesos”, señaló.

Coh Chuc afirmó que en estos momentos s e encuentran en diálogo con autoridades del gobierno del Estado y la Universidad Autónoma de Quintana Roo (Uaqroo) para encontrar los mecanismos qué permitan la rehabilitación del inmueble porque el INPI no tiene recursos para ello.

Dijo que hay un comodato firmado con la Uaqroo pero antes de dar ese paso deben agotar todos los esfuerzos para lograr su rehabilitación.

 

Cabe recordar que la Casa del Universitario Indígena – que se construyó en un predio de la Universidad de Quintana Roo con recursos de la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas -y que generó la inconformidad de estudiantes del CBTIS 214, por la afectación a un área donde realizaban actividades deportivas- fue inaugurada en el 2017 aunque nunca funcionó por lo que sus instalaciones fueron vandalizadas y el servicio de energía eléctrica y agua potable fueron suspendidos.

Esta Casa del Estudiante Indígena se construyó en terrenos de la Uqroo que fue objeto de litigio por parte de autoridades universitarias durante la rectoría de Angel Rivero Palomo y estudiantes del CBTIS 214, quienes argumentaban ser propietarios del terreno que les servía para realizar actividades deportivas.

Esta obra finalmente se construyó a través del programa de apoyo a la educación indígena de la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas con una inversión federal de 12 millones 354 mil pesos.

El objetivo principal era que los jóvenes provenientes de comunidades indígenas y de las casas del niño indígena puedan permanecer y terminar sus estudios superiores. Además se brindaría hospedaje digno, alimentación balanceada y productos de higiene personal a 100 adolescentes indígenas. (Noticaribe)

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