Por Itzel Chan

MÉRIDA, MX.- Hasta 2019, el número de personas que se sometía a alguna cirugía estética en Yucatán ascendía a cuatro mil 500 aproximadamente y hoy en día este número incrementa a casi seis mil personas, sin embargo, especialistas comparten que el 50% de estos casos viven depresión post operación, una situación de la que poco se habla.

Al respecto, Isidro Guerra, CEO de Line & Beauty, compartió que es muy poco frecuente que se hable de la depresión post cirugía estética, pero sí existe, ya que suele presentarse cuando las personas aún no estaban decididas si querían someterse a la intervención o no.

“Igualmente sucede con las personas que se sienten presionadas por operarse, o bien cuando tienen una idea de una cirugía y ya se les explicó por qué tiene que ser diferente”, indicó.

Además, es frecuente que las personas creen una imagen de cómo se verán y cuando notan los resultados reales, no se sienten del todo convencidas.

“Eso genera depresiones o temas de distimia en los pacientes. Otra forma en que aumentan los riesgos de sufrir depresión tras una cirugía es en aquellas pacientes que se deciden a operar para evitar divorcios o separaciones. O cuando no tienen el dinero completo y empiezan a conseguir dinero prestado, pero tampoco cuentan con capital para la recuperación, que también es un gasto importante”, explicó.

El especialista advirtió que las personas que deseen someterse a algún procedimiento quirúrgico por estética deben mantener un diálogo abierto con su médico.

“Ese es el momento adecuado para poder hablar acerca de este tipo de procesos y dejar bien en claro que es una etapa difícil si la o el paciente no se encuentra con calma”, mencionó.

También consideró que influye mucho ‘el ruido social’, es decir, cómo reacciona el círculo que rodea a la persona y esto ocasionalmente juega un papel importante en el proceso de recuperación.

Una de las recomendaciones que hace Isidro Guerra es que las personas lleven un acompañamiento psicológico al recuperarse, porque se trata de un cambio en sus cuerpos.

Advirtió que quienes ya se sometieron a una cirugía y presentan síntomas de depresión, que lo debido es atenderse y buscar ayuda psicológica.

El especialista mencionó que en Journal of Evaluation in Clinical Practice se hizo un estudio que demostró que aproximadamente la mitad de los encuestados habían sufrido depresión postoperatoria antes de ser dados de alta del hospital.

Algunos de los síntomas que se presentan son ansiedad, tristeza y cambios de humor, debido al estrés físico y emocional que conlleva el proceso quirúrgico.

Otros más que hay que prestar atención son desesperanza, pérdida de interés en actividades previamente placenteras, fatiga extrema o falta de energía, cambios en el apetito y el peso, problemas para dormir o dormir en exceso, dificultad para concentrarse o tomar decisiones y pensamientos de suicidio o autolesiones. (Noticaribe)

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