BAJA CALIFORNIA.- Los tres cuerpos que fueron localizados en un pozo de Ensenada, Baja California, sí serían de los dos hermanos australianos y su amigo estadounidense, quienes fueron reportados como desaparecidos el pasado 27 de abril. Así lo confirmó la titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), María Elena Andrade Ramírez, quien señaló que sólo se espera la llegada de los familiares para la identificación de las víctimas, publicó infobae.com.
La funcionaria bajacaliforniana precisó que fueron localizados a más de 15 metros de profundidad, en una zona de difícil acceso. Durante horas, rescatistas, bomberos y peritos de la FGE trabajaron en el pozo de La Bocana, Santo Tomás, para recuperar los restos de manera adecuada.
A la par, las autoridades continuaron trabajando en el área, descrita como “ríspida”, en búsqueda de más indicios.
Durante la mañana del 3 de mayo, medios locales informaron que elementos de la fiscalía estatal habían localizado tres cuerpos con huellas de violencia en una zona cercana a la que, se señala, los tres turistas extranjeros fueron vistos por última vez.
Se trata de los hermanos Jake y Callum Robinson, oriundos de Australia, y Jack Carter Rhoad, de Estados Unidos. Los reportes señalan que los tres arribaron a la playa del Puerto Faro San José para practicar surf el fin de semana. El lunes 29 de abril tenían programado su arribo a un airbnb ubicado en Rosarito, pero nunca llegaron.
Tras el reporte de desaparición correspondiente, las autoridades de México establecieron comunicación con el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), así como también con los Consulados de EEUU y Australia.
Según refirió la fiscal, se espera que este sábado 4 de mayo los familiares de los tres jóvenes arriben a Baja California.
“Crimen habría sido circunstancial”: Fiscalía
Durante la tarde del 2 de mayo, la FGE informó la investigación y posterior detención de tres personas, dos hombres y una mujer, por su posible participación en la desaparición de los tres surfistas extranjeros de 30 y 33 años de edad.
De acuerdo con declaraciones de la titular de la dependencia, la línea de investigación refiere que los los acusados ―de origen mexicano― habrían interceptado a los tres turistas durante algún punto del viaje para apoderarse del vehículo en el que se trasladaban. Sin embargo, estos se habrían resistido.
Entre las evidencias se encuentran restos de una tienda de campaña, ropa y manchas hemáticas, así como también huellas de arrastre en la zona donde se les habría asesinado. Adicionalmente, informó que uno de los sospechosos tenía en su posesión el teléfono celular de uno de los jóvenes desaparecidos.
“Consideramos que estas personas al ver la acción trataron de deshacerse de los cuerpos de las víctimas arrojándolas en este pozo (…), con el ánimo de que no fueran encontradas por ninguna autoridad o familiar, toda vez que al ver la magnitud de los hechos, se asustaron”, explicó.
Cabe destacar que previo a la localización de los cuerpos también se reportó el hallazgo de una camioneta semi calcinada tipo pickup Chevrolet Colorado, de color blanco y con placas de California. Se trata de uno de los dos automotores en los que los turistas viajaban. (Fuente: infobae.com)