Por Rafael Briceño
CHETUMAL, MX.- Ante la falta de respuesta de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA) como cabeza de sector a las propuestas para evitar nuevas inundaciones como las registradas el 14 de junio y semanas posteriores que dejaron millonarias pérdidas para familias y empresas, integrantes de un equipo multidisciplinario decidieron socializar el resultado de un estudio entregado a la Agencia de Proyectos Estratégicos de Quintana Roo (AGeproo) en el cual proponen una serie de acciones, que van desde el mantenimiento a la infraestructura existente así como realizar nuevas inversiones y también mejorar los servicios de recoja de basura para evitar este tipo de problemas.
Ante la invitación hecha por el titular de la Agepqroo, Jose Alberto Alonso, los expertos efectuaron sendos recorridos el 8 de julio por el gran canal y el drenaje de Ignacio así como el drenaje de la colonia Miraflores, Arboledas, Fidel Velázquez, Kilometro 10, el vado de la avenida Belice, Aeropuerto y la Nueva Generación, entre otros como resultado del diagnóstico hecho y presentado en una reunión del 1 de julio.
En el estudio entregado a la Agepqroo, en espera de que las instancias rectoras y académicas emitan su respuesta, los expertos dejaron sentado que las inundaciones pusieron en evidencia que no es suficiente con la construcción de grandes obras de infraestructura pluvial ya que también es necesario mejorar el sistema de recolección de Residuos Sólidos Urbanos (RSU), que actualmente es de 400 toneladas diarias, es decir 146 mil toneladas anuales, e involucrar a los ciudadanos en su adecuada separación entre orgánico e inorgánico.
Además consideraron necesario establecer un sistema complementario de limpieza y recolección de RSU vegetal en calles y avenidas (con camiones barredora) y un sitio seguro para la disposición final del producto de las podas, tanto de instituciones como de los ciudadanos ya que los camellones están saturados de este tipo de residuos solidos; elaborar un padrón de coladeras, bocas de tormenta, rejillas, estructuras de captación de agua pluvial que deben mantenerse sin obstrucción durante una lluvia moderada, fuerte o muy fuerte así como un mecanismo integrado por personal de las dependencias y ciudadanos voluntarios para garantizar que las estructuras empadronadas permanezcan sin obstrucciones durante la lluvia.
Los expertos fueron enfáticos al señalar la necesidad de un programa de mantenimiento de bocas de tormenta, rejillas, coladeras, colectores, canales a cielo abierto, estructuras de descarga a los cuerpos receptores y cuerpos receptores.
No creer que la construcción de una obra pluvial ya resolvió el problema de la inundación para siempre, ya que la eficacia de los sistemas pluviales se debe revisar periódicamente dado el dinamismo de la urbanización que cambia las condiciones de operación, área de la cuenca, velocidad de acumulamiento de la lluvia, reducción de área de absorción para mejorar la eficacia en drenar la lluvia de la infraestructura existente, explicaron.
En materia técnica consideraron necesario interceptar, en la ruta de los colectores, el agua pluvial para evitar que llegue al punto más bajo de las cuencas, rediseñar las bocas de tormenta, construir nuevos interceptores de tifos de agua, desincorporar áreas de los sistemas existentes, regularizar la tenencia de la tierra donde están construidos los canales de desagüe a cielo abierto y hacer las obras de protección y mejorar los sistemas que surgieron como acciones emergentes y construir sólidos sistemas pluviales.
Consideraron necesario iniciar el proyecto Parque de la Sabana, y al mismo tiempo limpiar y desazolvar el cuerpo de agua para operarlo como un vaso regulador, dando cauce a los excedentes hacia la Bahía de Chetumal y construir nuevos colectores pluviales de acuerdo al crecimiento de la ciudad además de crear un SIG de los sistemas pluviales y modelar su comportamiento ante diferentes intensidades de lluvia.
Manifestaron que no se mide el agua que se descarga porque no hay estadísticas del comportamiento de los sistemas “y ayudaría contar con un sistema de Estaciones Automatizadas para registrar la intensidad de la lluvia en tiempo real y con ello establecer un sistema de reacción oportuna”.
Aunque las propuestas de solución siguen en espera de respuesta de la CAPA. (Noticaribe)