CIUDAD DE MÉXICO, MX.- El Gobierno acusó que el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) es un órgano ineficiente para controlar a los integrantes del Poder Judicial, publicó 24-horas.mx.
Lo anterior, en voz de Luisa María Alcalde, titular de la Secretaría de Gobernación, quien señaló que el Consejo desechó, a lo largo de 18 años, 85 por ciento de 38 mil quejas presentadas en contra de funcionarios judiciales, por lo que, “es un órgano que no es eficiente para vigilar el comportamiento de los jueces”.
Y para sustentar su dicho, indicó que entre 2004 y 2023 se presentaron 38 mil quejas en contra de integrantes del Poder Judicial, de las cuales 32 mil fueron desechadas sin iniciar una carpeta, mientras que, de las sí investigadas, sólo se sancionaron a 472 jueces y magistrados, 1.2 por ciento del total de quejas; las sanciones fueron las siguientes:
- Apercibimientos y amonestaciones: 292
- Suspensiones: 102
- Destituciones: 41
- Inhabilitaciones: 23
- Sanciones económicas: 14
Además, como parte de la cargada que mantiene el Presidente saliente contra el Judicial, acusó que “de enero de 2023 a la fecha, el Poder Judicial ha presentado 72 denuncias contra jueces y magistrados ante el CJF y (no ha habido) ninguna ha resultado en sanción”.
En la reforma judicial propuesta por el titular del Ejecutivo el 5 de febrero, se propone sustituir al Consejo por un Tribunal de Disciplina Judicial y un Órgano de Administración.
Al respecto, Lilia Mónica López Benítez, consejera de la Judicatura, señaló que dichas figuras no contemplan las figuras de vigilancia, inspección, contraloría e investigación, lo que sí atiende el organismo del que es parte:
“Este órgano no debería revisar el criterio jurisdiccional, pues existe todo un sistema recursal de instancias y mecanismos de impugnación. Pretender lo contrario, convertiría al Tribunal de Disciplina en un órgano inquisitorio y de persecución”.
Lo anterior, durante su participación en los Diálogos Naciones sobre la Reforma al Poder Judicial. (Fuente: 24-horas.mx)