Por Rafael Briceño
CHETUMAL, MX.- Tras manifestar el rechazo hacia la declaración de Bacalar como Área Natural Protegida, el presidente del comisariado del ejido la Península, Roberto Salgado Sangri, reconoció que, a pesar de las cartas entregadas al presidente Andrés Manuel López Obrador y la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, no tuvieron una respuesta positiva a sus demandas, más que una declaración de que hasta el momento no hay tal intención sin que se haya formalizado.
Dijo que ante la nueva intentona de declarar ANP la zona que agrupa a 18 ejidos, más de 50 mil habitantes y unos 4 mil ejidatarios, esperan contar con el apoyo del gobierno del Estado como aliado “para frenar los intentos de imposición no sabemos si de partidos políticos, de manera particular el Verde Ecologista de México (PVEM) o de grupos económicos, de planes que van en detrimento del medio ambiente”.
El también integrante del Consejo Comunitario de la Cuenca de la Laguna de Bacalar recordó que en la penúltima visita de López Obrador y Claudia Sheinbaum entregaron una carta donde ejidatarios expusieron los motivos de su rechazo al ANP “no sabemos que tanto les interesó, pero escuchamos por ahí que la presidenta electa dijo que hasta el momento no hay planes para un ANP, pero no hubo nada por escrito”.
Anticipó que algunos ejidos presentarán una propuesta dentro de los programas de desarrollo local participativo (PLDP) que maneja la Semarnat y que permite a los ejidatarios el manejo ordenado de sus recursos “y evitar que vengan entes externos a imponer algo que no sabemos si viene de un partido o gripo económico porque siempre habrá especulación de tierras y hay que prever cualquier posibilidad de fraudes inmobiliarios y despojos.
Salgado Sangri reiteró que el Consejo Comunitario de la Cuenca de la Laguna de Bacalar se opone a la creación de un ANP o un Hábitat Crítico en el cuerpo de agua de la Laguna de Bacalar “porque hay intereses que buscan apropiarse de la tierra y el agua de una zona de incalculable valor para los residentes históricos, quienes siempre se han preocupado por su cuidado”.
Tenemos claro que existe toda una estrategia en la que están involucrados grandes capitales amafiados con grupos de poder político para apropiarse de grandes extensiones de tierra y, por supuesto, del agua que en abundancia existe en la zona, bajo la bandera ambientalista pero que solo buscan desestabilizar el desarrollo económico ya que “a río revuelto, ganancia de pescadores, finalizó.” (Noticaribe)