Por Itzel Chan
MÉRIDA, MX.- Ver en pantalla a una madre de familia que habla sobre el suicidio de su hijo es una imagen difícil de digerir. El nudo en el estómago es inevitable sentirlo.
La mamá de Justin aceptó hablar un poco de la situación que atravesó cuando su hijo decidió dejar de vivir. Con su autorización, estudiantes del Centro de Estudios Tecnológicos, Industriales y de Servicios (Cetis) 12 reflejaron su testimonio en un cortometraje y ahí la mujer repitió: si alguna vez piensas morir, piensa en tu familia y en toda la gente que te quiere y que dejarás.
En México, en 2023, se registraron 8 mil 837 suicidios, que representaron 1.1 % del total de muertes registradas de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Las tasas más altas de suicidio por entidad federativa se presentaron en Chihuahua, Yucatán, Campeche y Aguascalientes (15.0, 14.3, 10.5 y 10.5, respectivamente).
Por eso en territorio yucateco hay urgencia de hablar de la prevención del suicidio y especialistas en el tema realizan foros, talleres, charlas de sensibilización sobre este problema y recientemente desde el ámbito escolar se notan esfuerzos.
En el Festival de Cortometrajes “Salud mental para una vida sana” se presentaron 10 trabajos audiovisuales hechos por estudiantes. Usaron técnicas diversas como Stop Motion, técnicas de cómics, dibujos tipo anime, caricaturas o incluso actuaciones.
En su mayoría la línea de trabajo que presentaban las y los jóvenes tenía que ver con el sentimiento de soledad que transitan en esta etapa de su vida y cómo para algunas personas esto es difícil de sobrellevar.
Las y los personajes presentados pasaron por períodos de tristeza aguda, ansiedad y depresión y mostraron cómo estos sentires los aislaban del mundo y de sus seres queridos, llámese familiares o amistades.
Una advertencia constante que hicieron en cada trabajo tuvo que ver con la importancia de buscar ayuda, hablar y compartir lo que se siente, además de recurrir a una persona especialista en temas de la atención a la salud mental.
Una frase que se repitió con constancia fue: pedir ayuda no es un signo de debilidad.
Para el doctor Manuel Soberanis, docente del Cetis 112 fue también es importante conocer lo que piensan sus estudiantes, pues, aunque como adulto suponía otras problemáticas en la juventud, a través de los trabajos recibidos notaron que para las y los estudiantes la dinámica dentro de la familia es importante, ya que cuando hay algún factor que altera el ecosistema, muchos comienzan a sentir ansiedad y depresión.
“Todo surgió a través de un proyecto que abarca el aula, la escuela y la comunidad, y siendo Yucatán un estado donde el índice de suicidios es muy alto podría ser una buena idea trabajar para cuidar nuestra salud mental”, describió.
Más de 300 estudiantes de primer semestre trabajaron en la realización en equipo de estos cortometrajes, pero fueron seleccionados 10 para formar parte del festival y lo que se espera es que en un futuro puedan mostrar en otros planteles el resultado para promover esta iniciativa de participación entre estudiantes. (Noticaribe)