La Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe (FCCA por sus siglas en inglés) ha reconocido un retraso de seis meses en la implementación del nuevo impuesto de 860 pesos (42 dólares) por pasajero para cruceristas que lleguen a México, conocido como Derecho de No Residentes (DNR). Este impuesto, aprobado como parte de la Ley Federal de Derechos 2025, busca mejorar la recaudación de derechos migratorios y garantizar un control más eficiente.
Originalmente, el impuesto debía entrar en vigor el 1 de enero de 2025, pero ahora se aplazará hasta el 1 de julio de 2025. El aplazamiento fue una iniciativa impulsada por la gobernadora Mara Lezama tras conocerse la aprobación del impuesto en el Senado la semana pasada.
Este impuesto impone un cargo adicional de 42 dólares por pasajero, lo que casi triplica el promedio actual de 20 dólares por impuestos y tasas que ya se cobran a los visitantes de los puertos mexicanos
EL anuncio se dio después de un encuentro entre representantes de la FCCA con funcionarios del gobierno mexicano, aunque no se dieron más detalles al momento.
La FCCA señaló que este aplazamiento temporal es positivo, pero enfatizó la necesidad de medidas más amplias para abordar el impacto que considera devastador para el turismo de cruceros, la economía mexicana y las comunidades costeras que dependen de esta actividad.
La FCCA, que representa a 22 líneas de cruceros como Royal Caribbean, Carnival y Disney, había advertido que este impuesto haría que México sea 213% más caro en comparación con otros destinos del Caribe, lo que representaba una “grave amenaza” para la industria turística del país.
Como ejemplo, explicó que una familia de cuatro personas pagaría 168 dólares adicionales por visitas breves, mientras que los turistas que ingresan por tierra y permanecen menos de siete días están exentos de este gravamen.
La FCCA advirtió que esta carga desincentivará a los turistas, alterará itinerarios y provocará efectos económicos adversos en comunidades que dependen del turismo de cruceros.
Representantes de la industria han advertido que esta medida podría hacer que México pierda competitividad frente a otros destinos, ya que los cruceros planean sus itinerarios con años de anticipación. Empresas del sector han comenzado a explorar rutas alternativas fuera del país.
Sin embargo, se proyecta que el impuesto podría generar más de 5 mil millones de pesos para México en un contexto de creciente flujo de cruceros, especialmente en el Caribe. (Agencias)