Causa malestar reapertura del Casino Playboy en Zona Hotelera de Cancún

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PLAYBOYCANCÚN, MX.- Levanta indignación entre la comunidad católica el hecho de que el casino Playboy haya abierto sus puertas después de casi un año de total inactividad, primero por las clausuras de que fuera objeto por parte de Protección Civil y posteriormente de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el Sistema de Atención Tributaria (SAT); existe el temor de que los inconformes puedan realizar algún tipo de acto de protesta, motivo por el cual la Policía Turística recibió instrucciones precisas de implementar una estrecha vigilancia los domingos desde las ocho de la mañana hasta la hora en que se oficie la última misa del día.
El sábado se registró calma total en las inmediaciones del casino, cuyas puertas permanecían cerradas sin que se observase a ningún trabajador al pendiente, ni tampoco clientes que pretendieran ingresar para divertirse.
Se intentó localizar a algún responsable de la iglesia de Cristo Resucitado con objeto de que fijase la postura de la comunidad católica respecto a la reapertura del casino, sin resultado positivo.
Trabajadores de negocios cercanos manifestaron que la noche del viernes muchas personas acudieron al casino, especialmente del sexo masculino, todos atraídos por las celebridades y “conejitas” que desfilaron por la alfombra roja y aunque algunos, como Fernando Cifuentes Romero, quien labora en un hotel de las inmediaciones, pensaron que tal vez los inconformes pretendieran hacer algún tipo de manifestación de protesta, afortunadamente no sucedió nada.
“Sí llegaron varias personas que se quedaron en la banqueta de enfrente observando, pero la verdad, ignoro si serían simples curiosos o católicos que se presentaron con la intención de quejarse pero se lo pensaron mejor porque en realidad eran muy pocos”.
Eduviges Galindo de Sánchez, mujer de la tercera edad que reside en Pok-Ta-Pok y suele acudir todos los días a la iglesia, manifestó al ser consultada sobre la reapertura del Casino que “es una vergüenza que nos pongan un espectáculo así tan cerca de un recinto sagrado, allá adentro hay vicio, mujeres ligeras de ropa y las personas que juegan solamente van a perder su dinero, no entiendo cómo las autoridades lo han permitido, lo único que hay ahí es pecado”.
El casino Playboy abrió sus puertas el cinco de diciembre del 2010 con un amparo otorgado por un juez de Monterrey, pero previo a su apertura, la prelatura Cancún-Chetumal promovió un amparo contra su operación, con el argumento de que violentaba los artículos 28 y 38 del reglamento de la Ley Federal de Juegos y Sorteos, así como el reglamento de Espectáculos y Diversión Municipal, la Ley Federal y Estatal de Salud y las normas de seguridad de Protección Civil.
El 28 de junio del 2011, la juez Cuarta de Distrito en Cancún se declaró legalmente incompetente para conocer el amparo interpuesto por la Iglesia contra la Secretaría de Gobernación, en virtud de que dicho amparo se tramitó en el Distrito Federal y no en Benito Juárez, motivo por el cual ordenó remitir el expediente 673/2011 al juez de Distrito en turno de la capital del país.
El 20 de julio la juez Décimo Tercero de Distrito del DF se declaró legalmente competente y anunció la audiencia constitucional para el 22 de septiembre del año 2011, pero hasta la fecha se desconoce si tal audiencia se concretó alguna vez, en virtud de que la resolución se difirió de manera reiterada.
El cinco de noviembre del año pasado la Secretaría de Hacienda y Crédito Público pegó varios sellos de clausura en la puerta del inmueble, por presuntas irregularidades en su operatividad administrativa, tal y como declarara en esos momentos el obispo Pedro Pablo Elizondo.
Y en el transcurso del mes de septiembre, se retiraron los sellos de clausura, aunque el casino apenas abrió sus puertas el pasado 30 de noviembre, tras pasar por un procedimiento de remodelación que tuvo un costo de seis millones de pesos. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)

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