En Quintana Roo se respira un creciente clima de odio contra periodistas y medios críticos: Clima de odio alentado, tolerado y financiado desde la estructura de poder que arropa al Gobernador.
Y no es la primera vez que lo decimos: por omisión o por comisión, Roberto Borge es el responsable.
O lo ordena o lo permite, así de simple.
Y esto es así porque ha sido Borge quien ha usado recursos públicos para crear y financiar una red de “trolles” y cuentas falsas para enturbiar las redes sociales y tratar de manipular el debate sobre temas de coyuntura, como ya demostró recientemente la propia Carmen Aristegui en un noticiero a nivel nacional.
Ha sido Borge quien, desde esta estulticia política, ha cultivado la diatriba barata, el insulto vulgar, la difamación y la injuria para envenenar a sus detractores, ya sean políticos, opositores, periodistas, medios independientes o simplemente ciudadanos que emiten opiniones que agravian el ánimo de este joven Gobernador.
Ha sido Borge quien, con su intolerancia a flor de piel, ha alentado los ataques contra quienes no lo alaban y no le tapan sus frivolidades y desvíos, ya que en su lógica, “si no estas incondicionalmente conmigo, estás contra mi”.
Ha sido Borge quien ha premiado con jefaturas, delegaciones, sindicaturas, regidurías, diputaciones y hasta alcaldías los servicios de una primera generación de advenedizos, porros del Twitter y del Facebook, que no tuvieron otro mérito que la genuflexión y el acatar órdenes para ganarse un “hueso” temporal.
Ha sido Borge el que, en su inmadurez política, ha escupido sobre el diálogo y la conversación, para alimentar un verdadero clima de intolerancia que hoy, por primera vez, ha dado muestras que se le está saliendo de control.
Al rodearse de arribistas e inmaduros, de jovencitos ambiciosos y sin escrúpulos que sólo buscan su oportunidad de figurar y hacer méritos ante la mirada de su dictador, Borge ha abierto las puertas para que la intolerancia en redes sociales se salga de su cauce virtual para traducirse en agresión y represión en las calles de Quintana Roo.
Ayer, el reportero Javier Vite sufrió un incidente: un Chevy que lo estaba siguiendo, se abalanzó sobre la moto en la que se transportaba para derribarlo y causarle heridas diversas. El incidente está plagado de señales ominosas y, las primeras denuncias hechas por amigos cercanos del reportero, se apuntan que no se trató de un accidente.
Hace 10 días, Javier Vite hizo correr al Alcalde de Benito Juárez (Cancún), Paul Carrillo de Caceres, cuando trato de entrevistarlo con preguntas que no eran de su agrado, lo que le acarreó críticas y burlas a este novel funcionario.
A falta de una investigación seria y sin línea, no hay elementos para afirmar que el Gobernador o el Alcalde de Cancún hayan dado la instrucción de perjudicar de manera directa al reportero Vite.
Sin embargo, hay elementos para sospechar que el “accidente” no fue tal y que se han dejado sueltos a los perros del sistema para dar rienda suelta a un odio inducido contra reporteros y medios desde las redes sociales.
En este ambiente caldeado, lo único que separa un insulto en Twitter de una agresión física en la calle es, literalmente, un p…orro con iniciativa.
Y por si esto no fuera poco, ayer mismo, después del “accidente” de Javier Vite, desde las mismas cuentas falsas y de “trolles” del Gobernador, y usando un libelo impreso publicado por los ejecutores de la “guerra sucia” electoral financiada por Borge, se desató una campaña contra Sergio Caballero.
En esta campaña, se trata de vincular al corresponsal de Proceso en Quintana Roo con un narcomenudista detenido en un domicilio (y no en un parque como se informó) de la Región 95, enfrente de donde vive desde hace muchos años este periodista, a quien no es la primera vez que han buscado difamar, como una estrategia burda para acallar su línea crítica y vertical ampliamente conocida porque antes de trabajar en la prestigiada revista de Julio Scherer, fue corresponsal del periódico Reforma durante 15 años.
Otros reporteros y medios independientes, incluyendo Noticaribe, han sido blancos de estas campañas de injurias, en diversos momentos y por diferentes motivos.
La persecución a medios y periodistas independientes ya es intolerable.
Tirar lodo que algo quedará, una estrategia de desinformación encumbrada por el nazi Joseph Goebbels, ha encontrado en Quintana Roo emuladores como Roberto Borge, quien ha inovado con el escarnio y la difamación ahora desde las redes sociales.
En el pasado, desde Noticaribe, hemos hecho llamados al Gobernador para que modere su intolerancia y frene a sus huestes de incondicionales, pero nada ha ocurrido.
El financiamiento con recursos públicos de esta “guerra sucia” es, además, inconcebible y todos los quintanarroenses deberíamos exigir una investigación y un deslinde que no deje lugar a dudas por parte de Roberto Borge.
Sin embargo, está ocurriendo lo contrario: La persecución contra periodistas y medios críticos se ha incrementado porque Roberto Borge sólo se satisface con elogios y una visión de un mundo de carámelo que no tiene correspondencia posible en la realidad cotidiana de este Quintana Roo.
Hoy, desgraciadamente, se han perdido los equilibros y nadie parece capaz de frenar la ínfulas de este Gobernador.
Pero la intolerancia es un animal salvaje que siempre termina por desbordar a sus promotores.
Y en Quintana Roo la intolerancia se está saliendo de control.
¿Pretenderá Roberto Borge seguir gobernando desde la injuria y la descalificación, desde la degración de la política y la civilidad pisoteada?
Seguir por esta ruta es un peligro para la estabilidad y las libertades de los quintanarroenses.
En este punto, dejamos constancia de lo que está ocurriendo y sólo repetimos: por omisión o por comisión, Roberto Borge lleva mano.
Ojalá este Gobernador reflexione y rectifique.
Ese gobernador es un prepotente, altanero y corrupto; los maestros lo odian, los taxistas lo odian, los burocratas lo odian, los chetumaleños lo odian… nada que ver con el Gato Felix que, por lo menos, era ecuánime y tranquilo… el gordito está cavando su futuro político. Cuando se vaya habrá fiesta….
pleito entre los tres primeros poderes y el supuesto cuarto poder!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
No que muy machitos??? Pinches putitos se sienten muy chuchas cuerearas atrás de sus plumitas…. Aguanten vara perros
Antes de que llegara a ser gobernador! TODO EL MUNDO SABÍAMOS de la mentalidad criminal, pirómana y revanchista del regordete BORGE, que con el poder se ha remarcado este perfil de personalidad. El poder todo corrompe y una mente retorcida y perversa, peor lo daña. Como que ya viene siendo hora que la Federación tome cartas en el asunto de Quintana Roo, pues los excesos u las superficialidades de este imberbe descarriado, tiene visos para ir de mal en peor.
Ni quien los fume solitos hacen que los odien al dar notas falsas contra el gobernador conociendo que el estado es priista son como el loco del pueblo fanfarroneando y que nadie pela…
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