Por si las cosas no pudieran estar peor para el gobierno estatal panista-perredista, ahora en Solidaridad hay una contingencia post-electoral, para no llamarlo conflicto post-electoral.
Tanto la candidata oficial, Cristina Torres, como la opositora Laura Beristaín, se dicen ganadoras de la presidencia municipal.
En este momento, cada candidata presenta el cómputo que más le conviene. Laura se escuda en los números del Programa de Resultados Electores y Preliminares (PREP) y Cristina en la ‘sábana’ de los resultados preliminares.
Ninguno es el definitivo y no están contabilizados todas las actas, pues suele ocurrir que funcionarios de casilla improvisados o que tuvieron una mala capacitación las meten dentro de los paquetes.
En la actualidad se cuentan cuatro veces las elecciones: En muestras aleatorias, en el PREP, en el conteo preliminar y en el conteo definido.
Este conteo definitivo empieza el miércoles y ahí se contarán además las actas que estén dentro de los paquetes.
Por lo pronto, la sede del Ieqroo está rodeada de ‘cristinistas’ y afines a Laura Beristaín y la tensión aumenta minuto a minuto en Solidaridad.
