El Interplaya, otro negocio particular de Carlos Joaquín

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PLAYA DEL CARMEN, MX.- Carlos Joaquín González es contador de profesión, era la carrera que ejercía antes de que lo hicieran presidente municipal del municipio Solidaridad, en donde previo a su posición de edil, ocupó el cargo de tesorero, en la administración de Gabriel Mendicuti.


Como contador Joaquín González bien sabrá que todo gasto debe comprobarse, y más si se trata de dinero público. El presupuesto no es una chequera particular, y cada centavo que sale de las arcas municipales necesariamente requiere de una factura que lo ampare.
Pues bien, el hoy candidato a diputado federal por el PRI para el Distrito 03, con cabecera en Cancún, no dejó ni una triste hoja a mano que justifique una erogación por 4.7 millones de pesos por supuestas obras realizadas en el deportivo Mario Villanueva, y de las cuales no se cuenta con una sola factura; hay otros 6.7 millones de pesos sin comprobar por concepto de nómina de los jugadores.
El que este tipo de irregularidades, puestas al descubierto a través de solicitudes de información, no hayan sido detectadas por la Comisión de Hacienda del Congreso es una evidencia más del círculo perfecto que prevalece entre los poderes del Estado en Quintana Roo, gobernado por una abrumadora mayoría priista representada por unas cuantas familias, entre otras, la familia Joaquín.
Millones de pesos, sin comprobar
En el ejercicio 2007, último año completo de la administración de Carlos Joaquín, el presupuesto del equipo de futbol de segunda división Interplaya registró un gasto por 4 millones 735 mil 564 pesos por concepto de “restauración y mantenimiento alumbrado e instalaciones deportivas”.
De acuerdo a la solicitud de información 166/2008, el 29 de enero de 2008 se registró una erogación de 1 millón 250 mil pesos para “mantenimiento de instalaciones eléctricas”; el 8 de febrero, de un millón de pesos para la “restauración y mantenimiento del alumbrado”; el 19 de febrero, 50 mil pesos para la “restauración y mantenimiento del alumbrado”. Otro día, no especificado, salieron de las arcas municipales 500 mil pesos para el “pago de trabajos generales de restauración y mantenimiento de instalaciones eléctricas”; el 20 de marzo la Promotora Deportiva utilizó otros 300 mil pesos para el “pago de trabajos generales de restauración y mantenimiento de instalaciones eléctricas”. Hubo otras dos erogaciones por el mismo concepto: “pago de trabajos generales de restauración y mantenimiento de instalaciones eléctricas” de un millón 250 mil pesos y de 335 mil 564 pesos, aunque no se precisan fechas.
Esta cantidad fue entregada a la empresa Arco Construcciones, cuyo propietario, el arquitecto Luis Arana, fungía también como tesorero en la Promotora Deportiva Interplaya. Arco fue una de las empresas encargadas de ejecutar trabajos para el ayuntamiento, desde obras de pavimentación hasta alumbrado.
En la misma solicitud de información se requirió “poner a la vista las facturas que amparen el gasto (de los 4 millones 735 mil 564 pesos)”, sin embargo, esta petición no fue atendida, por lo que se interpuso un Recurso de Revisión; el resolutivo de dicho recurso obligó a la Unidad de Transparencia de Solidaridad a realizar la “declaratoria de inexistencia” de documentos, la cual quedó marcada con el número de folio 004/2008, y en la que se lee: “Esta Unidad, previo análisis del caso, y habiéndose cerciorado de que se tomaron las medidas pertinentes para localizar la información solicitada consistente (…) en poner a la vista las facturas que amparen el gasto, mismo que fue solicitado a la Tesorería municipal y Dirección General del Instituto del Deporte municipal, quienes contestaron que en sus archivos no se cuenta con esa información (…)”. (Hoja tres del documento anexo)
Así de simple, luego de varios meses de búsqueda ni la Tesorería ni la Dirección General del Instituto del Deporte municipal, de la que entonces dependía el Interplaya, encontraron facturas o recibos por el supuesto gasto ejercido.
Lo mismo ocurrió con los comprobantes de la nómina de los jugadores del Interplaya, la cual pasó de un millón 316 mil pesos en 2005, a 6 millones 779 mil pesos, en 2007; otra vez, curiosamente el año de salida de Carlos Joaquín González. De los tres años que Joaquín González tuvo bajo se administración el Interplaya, sólo se tienen comprobantes de nómina del 1 de agosto al 15 de octubre del 2005, y del 16 de enero al 15 de febrero del 2006; del 2007 no hay nada.
Por este faltante de documentos de los demás periodos, la Unidad de Transparencia de Solidaridad se vio nuevamente obligada a declarar otro acuerdo de inexistencia, esta vez el 003/2008, en el que la Dirección General del Instituto del Deporte señala que: “(…) no debe considerarse esta respuesta como incompleta o que se está ocultando la información solicitada, puesto que sólo existe en nuestros archivos los datos anexos a este memorial. En este orden. Solicito a usted que en observancia de la ley de la materia, tenga a bien proceder a elaborar y, en su caso, acordar, la inexistencia de la información a que se hace referencia a la solicitud con folio 0164. (Hoja tres del documento anexo).
El manejo que hizo Carlos Joaquín González de las finanzas de Solidaridad no deja dudas, fue poco pulcro y puede ser muy cuestionable; la falta de facturas por varios millones de pesos, más las prácticas de corrupción entre su gobierno y múltiples empresarios están comprobadas, aún así, en plena campaña, el candidato priista por el Distrito 03 ha prometido trabajar para los cancunenses.
Afortunadamente, como diputado federal, Joaquín González no tendrá acceso a recursos públicos, pero de concretarse su aspiración en la sucesión por la gubernatura, los quintanarroenses no podemos esperar sino seis años más de saqueo del erario público. (Noticaribe/última parte)

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