CANCÚN, MX.- Luego de reconocer la existencia de sellos de clausura colocados por la Profepa en terrenos donde desean construir el proyecto Punta Carey, el fideicomiso del mismo nombre indicó que se atenderá el procedimiento en tiempo y forma.
Michael Katz, representante del desarrollo turístico planteado a un costado del Santuario de la Tortuga Marina de Xcacel-Xcacelito, en la Riviera Maya, aseguró que se han conducido con apego a derecho y dijo esperar una postura idéntica en cuanto a los actos de autoridad emitidos por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
La declaración del empresario se enmarca en el contexto de la reciente solicitud hecha por una red de grupos de la sociedad civil organizada a las autoridades ambientales, para que no autoricen el proyecto en el predio de 26 hectáreas, colindante con el área natural protegida de Xcacel, debido a que el fideicomiso inició trabajos en el sitio sin tener aún los permisos correspondientes, lo cual motivó la clausura por parte del ayuntamiento de Tulum y luego de la Profepa.
“La Semarnat y el municipio de Tulum deben impedir que se le otorgue un permiso de construcción al Fideicomiso Empresarial Punta Carey, debido a que intentó construir un proyecto de forma clandestina y poniendo en riesgo el Santuario de la Tortuga Marina, Xcacel-Xcacelito, el más importante del Caribe”, coincidieron el Grupo Ecologista del Mayab (GEMA), Teyeliz, MOCE Yax Cuxtal, Defenders of Wildlife, Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) y Greenpeace México.
Al respecto, Katz aclaró que no piensa participar más en batallas mediáticas que le enfrenten con grupos ambientalistas o autoridades, por lo que sólo aceptó que en efecto se colocaron sellos de clausura en el predio propiedad del fideicomiso e informó que el tema será atendido por su equipo jurídico, luego de averiguar la razón que motivó la medida cautelar.
Asimismo, subrayó que no han hecho nada fuera de la ley, por lo que se encuentran tranquilos y confiados en que se aclarará la situación.
Las agrupaciones antes mencionadas denunciaron el domingo pasado que el proyecto carece de autorización por parte de la Semarnat y del municipio de Tulum y pese a ello, el Fideicomiso Punta Carey realizó acciones para delimitar el predio, presuntamente deforestando ilegalmente ejemplares de manglar y palma chit, ambas especies en categoría de riesgo.
“Tras la clausura de las obras de Punta Carey, en Xcacel, las organizaciones firmantes exigimos a la Dirección General de Impacto Ambiental (DGIRA) niegue la autorización al proyecto Punta Carey.
“Estas acciones demuestran que a pesar de ser un proyecto que se ha cuestionado reiteradamente en los últimos meses, los promoventes pretenden realizar el proyecto a través de chantajes monetarios e ilegalidades”, dijo Alejandra Serrano Pavón, representante regional del Cemda en Quintana Roo.
El predio en donde se proyecta el desarrollo Punta Carey se encuentra dentro del predio de 156 hectáreas que componen Xcacel-Xcacelito que, a su vez, posee un área decretada como Santuario de la Tortuga Marina, considerado como Zona Especial de Protección de Flora y Fauna, ya que es la principal playa de anidación de las tortugas marinas caguama y blanca en todo el Caribe mexicano. Ambas especies de tortugas están en peligro de extinción.
La zona también está reconocida como humedal de importancia internacional por la Convención Ramsar y en ella se encuentran 16 especies endémicas vegetales además de la palma chit, la palma kuká, manglares negro, blanco y botoncillo, así como el zorrillo, la serpiente de cascabel y la aguililla negra, la tortuga de pantano y la rana yucateca, todas en alguna categoría de riesgo según la normatividad mexicana. (Fuente: El Periódico)
Lo que quieren estos ambientalistas es confundir a todo mundo. Una brecha no es la construcción de un proyecto. Que sean técnicamente claros al afirmar que las acciones realizadas ponen en riesgo a las tortugas. ¡Expliquen!
Coincido plenamente con el comentario anterior. Lo que quieren estos puercos, que nos tienen hartos, es dinero.
Por otra parte, queremos números reales que nos digan si es que las tortugas se mantienen al borde de la extinción, pero ojo, porque si es que siguen en la \”lista roja\” quiere decir que las acciones realizadas han sido inútiles y se han tirado a la basura y a los bolsillos ecologistas \”tortugueros\” millones de pesos. Si se ha recuperado la población pues bienvenidos los hoteles y que los ecologistas cierren el hocico ¿no?
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