CHETUMAL, MX.- En punto de las 17:00 horas, poco más de 20 elementos de la 34ª Zona Militar a bordo de tres tanquetas en coordinación con efectivos de la Policía Federal Ministerial y policías estatales, trasladaron los 31 kilos 700 gramos de cocaína que fueron asegurados en el interior de una maleta hallada en una camioneta de lujo Dodge tipo Nitro, con placas de circulación UVY-72-26, color blanco.
CHETUMAL, MX.- Las dos mujeres que son buscadas por la Policía Federal Ministerial por su presunta vinculación con los casi 32 kilos de cocaína incautados en el interior de una camioneta Dodge tipo Nitro se ampararon contra el agente del Ministerio Público de la Federación en esta ciudad y otras, en un intento de evadir la acción de la justicia federal.
Se trata de las hermanas Janeth y Lucía Acosta Huesca; la primera es dueña del vehículo marca Dodge tipo Nitro, color blanco, con placas de circulación UVY-72-76, en donde fue encontrada la maleta que contenía 31 kilos 700 gramos de cocaína, en la colonia Fovissste Tercera Etapa.
Pero de acuerdo con las primeras investigaciones, la maleta, al parecer, es propiedad de Lucía, por lo que ambas mujeres son buscadas por la Policía Federal Ministerial para el deslinde de responsabilidades.
Janeth es propietaria, además, de la casa marcada con el número 45, donde supuestamente se escondieron los dos individuos que ocupaban la camioneta, mientras que Lucía es dueña de una casa cercana, marcada con el número 22. Ambas están custodiadas por la policía, a la espera de ser cateadas.
Sin embargo, el día de hoy, las dos mujeres promovieron un amparo ante el Juzgado Primero de Distrito de esta ciudad en contra del agente del Ministerio Público de la Federación con sede en esta ciudad y de otras autoridades.
A Janeth Acosta Huesca se le admitió su demanda mediante el expediente 891/2009, mientras que la de Lucía se le aceptó en el expediente 892/2009.
Con los sendos amparos que promovieron las dos mujeres presuntamente vinculadas con el decomiso de casi 32 kilos de cocaína evitarán que sean detenidas por la autoridad federal momentáneamente.
Y es que Janeth Acosta Huesca es dueña del vehículo en el que fue hallada la maleta que contenía los casi 32 kilos de cocaína y también es propietaria de la casa ubicada en la privada Rufo Figueroa número 45.
Mientras que Lucía es dueña de la vivienda localizada en la misma calle pero con número 22. Ambas casas están ubicadas en la colonia Fovissste Tercera Etapa.(Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
Las fuerzas castrenses, federales y policías estatales, se trasladaron en forma de convoy por la avenida Insurgentes y posteriormente tomaron la avenida Andrés Quintana Roo, hasta que llegaron a la base militar, donde la droga quedó bajó resguardo del Ejército.
Los casi 32 kilos de cocaína fueron trasladados bajo un impresionante convoy de fuerzas castrenses, agentes federales y estatales a las instalaciones de la Zona Militar.
Como se recordará, la tarde del pasado martes en la colonia Fovisste III etapa, entre las calles José Siuroub y privada Rufo Figueroa, fue asegurada una camioneta marca Dodge tipo Nitro con placas de circulación UVY-72-76, en la cual hallaron una maleta con 31 kilos 700 gramos de cocaína, y minutos después fueron detuvieron a Geovanna Reyes Acosta y a Tania Raquel Saucedo, de 18 y 21 años, respectivamente.
Mismas que fueron presentadas ante el agente del Ministerio Público de la Federación para declarar con relación al decomiso de un poco más 30 kilos de cocaína, pero quedaron en libertad por considerar que no tienen relación con la droga, mientras que las dos casas presuntamente vinculadas con el decomiso siguen custodiadas por elementos policiales en espera de una orden de cateo.
Las dos mujeres en sus declaraciones explicaron que el día de los hechos habían ido a visitar a su tía Janeth Acosta Huerta con domicilio en la privada Rufo Figueroa número 45, colonia Fovissste tercera etapa, quien es la dueña del vehículo donde fue hallada la droga.
De acuerdo a las primeras investigaciones policiales, la casa color blanco, número 45 es propiedad de Janeth Acosta Huesca y la vivienda color verde con portón eléctrico, número 22 es de Lucia Acosta Huesca, su hermana.
En la primera casa es donde supuestamente se escondieron los dos ocupantes del carro tipo Nitro, con placas UVY-72-76, en el que fue hallada una maleta que contenía la cocaína.
Según fuentes policiales, Janeth Acosta Huesca tiene alguna vinculación con Javier Cortés Fierro, ex líder de los presos del Centro de Readaptación Social de Chetumal (Cereso), quien fue liberado en el año 2007 luego de haber purgado una condena de 13 años de cárcel por narcotráfico.
De ahí que las autoridades federales sospechan que Janeth Acosta Huesca es una de las principales personas que se dedican al contrabando de droga en la zona Sur de la entidad, por lo que ahora es buscada por la policía para el deslinde de responsabilidades.
La policía también anda en busca de un auto Nissan Platina color gris o plateado, en el presuntamente se transportan personas relacionadas con el decomiso de droga. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
CHETUMAL, MX.- Los casi 32 dos kilos de cocaína que fueron incautados por elementos de la Policía Federal Ministerial en un vehículo tipo Nitro propiedad de Janeth Acosta Huesca puede ser parte de un cargamento de alcaloide que llegó vía aérea a territorio beliceno y luego fue introducido a territorio quintanarroense vía terrestre en algún punto de la frontera México-Belice, porque la bolsa de nylon con que está cubierto cada paquete de droga es totalmente diferente a la que tienen los cargamentos que llegan vía marítima a las costas de la entidad, que es más gruesa y a veces hasta viene reforzada con cinta canela para protegerla del agua.
Como se recordará, el día 20 del presente mes, elementos de la Policía Federal Ministerial incautaron en esta ciudad casi 31 kilos 700 gramos de cocaína que se encontraba en una maleta, la cual fue hallada en el interior de un vehículo Dodge tipo Nitro, propiedad de Janeth Acosta Huesca.
Según un comunicado oficial de la PGR, con este cargamento se podía preparar 210 mil dosis de cocaína para el narcomenudeo y consideran que estaban destinadas a distribuirse en el propio estado de Quintana Roo.
Los 31 kilos 700 gramos de cocaína estaban distribuidos en 30 paquetes cubiertos con nylón de celofán, como para protegerlos del medio ambiente, y algunos paquetes están enumerados.
El mismo comunicado dice que el decomiso se logró por medio de una llamada anónima recibida en la Delegación de la PGR en Quintana Roo, que decía que en una camioneta Nissan blanca iba a realizarse un traslado de cocaína a Cancún y que era sólo cuestión de horas para que partiera el cargamento de la colonia Fovissste Tercera Etapa, sitio donde efectivamente se encontraron los casi 32 kilos de cocaína, dentro de un Dodge Nitro color blanco, en una maleta color verde, sin que pudieran ser capturados sus ocupantes, dos individuos que se dieron a la fuga al ver a los policías.
A diferencia de los paquetes decomisados en ese operativo, los que son traficados vía marítima procedentes de Colombia vienen en bolsa de nylon más gruesa, y bien protegidos con cinta canela para protegerla del agua.
Por ello no se descarta la posibilidad de que los casi 32 kilos de cocaína incautados por la Policía Federal Ministerial sean parte de un cargamento de droga que llegó vía aérea a Belice y que fue ingresado a territorio mexicano a través de la frontera México-Belice vía terrestre.
En este sentido, fuentes policiales presumen que el vehículo Nitro llegó a esta ciudad procedente de la ribera del Río Hondo, pero para ello tuvo que pasar el puesto de revisión ubicado a la salida de esta ciudad.
Consideran que la droga iba a ser entregada a alguien de esta ciudad, pero no llegó a su destino final ya que antes de ello, los dos tripulantes del vehículo en la que era transportada al ver la presencia de los elementos de la Policía Federal Ministerial se pusieron nerviosos y supuestamente corrieron a esconderse en la casa marcada con el número 45, propiedad de Janeth Acosta Huesca.
Cabe recordar que México y Belice comparten una línea divisoria fronteriza de 278 kilómetros de longitud, de los cuales 85 corresponden al límite marítimo en la Bahía de Chetumal y los restantes 193 son de la frontera terrestre dividida naturalmente por el Río Hondo y sus afluentes, de modo que se trata de una región de gran extensión, donde por años han operado los narcotraficantes para usarlos de trampolín en el tráfico de cocaína.
A ambos lados de la línea divisoria terrestre se encuentran grandes extensiones de cultivos de caña, así como caminos rurales que han sido utilizados para el aterrizaje de avionetas cargadas con drogas, tanto del lado beliceño como el mexicano. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
