Destruye el desarrollo turístico mecanismos de defensa en costas

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PLAYA DEL CARMEN, MX.- El titular de la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA), Eduardo Enrique González Hernández, señaló que el acelerado desarrollo turístico del estado ha sepultado el ecosistema al acabar con las defensas naturales de protección como las dunas y el mangle.


Durante la presentación del simposio “Planeación, Diseño y Construcción Sustentable en el Caribe Mexicano”, el funcionario federal manifestó que el deterioro del medio ambiente en Quintana Roo, específicamente en la zona norte, es una prioridad para atender y revertir.
“No debemos permitir que en estos paraísos naturales exista esa idea del hotelero, que ofrecen servicios donde el huésped sale al balcón y le da una cachetadita al delfín. Eso no puede ser”, rechazó categóricamente.
Consideró que se ha acabo con los mecanismos de defensa que genera la naturaleza en las costas caribeñas mexicanas, especialmente de las dunas y el manglar generando un desequilibrio ecológico y una vulnerabilidad mayor a los huracanes al no existir esas barreras naturales.
“Y después vendrá la selva baja, ahí es donde debemos actuar con los hoteles renombrados a nivel mundial; basta que construyamos sobre dunas, playas. Lo del mangle (su destrucción) no es un capricho, es una profunda ignorancia, yo lo llamaría así.
“Tenemos que enderezar el ecosistema de Benito Juárez, desde Punta Nizuc a Punta Cancún por decir un ejemplo, porque se ha rebasado el ecosistema, se pusieron hoteles con muchas ganas de invertir, pero con muy poca conciencia ambiental”, lamentó.
Eduardo Enrique González, quien en próximas fechas será quien avale o rechace el tan controvertido proyecto Punta Carey que contempla la edificación de 104 habitaciones dentro del Santuario de Tortuga Marina Xcacel-Xcacelito, enfatizó que el gobierno federal tiene el interés de seguir protegiendo el corredor Cancún-Riviera Maya.
Por último llamó a los medios de comunicación a no desinformar a la sociedad, porque temas como la recuperación de playas se manejan con amarillismo e ignorancia de los aspectos medioambientales. (Fuente: SIPSE/Novedades de Quintana Roo)

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