MÉXICO, DF.- Quintana Roo cayó del puesto nueve al 13 en el índice de competitividad estatal del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) debido al crecimiento en homicidios y la deuda pública. Pese a esto sigue siendo el destino favorito más fuerte en las inversiones turísticas de la región sur-sureste.
El Distrito Federal, Nuevo León y Querétaro lideran el Top 10 de los mejores lugares para invertir en el país, de acuerdo con el Índice 2010 de Competitividad del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
A los tres primeros estados le siguen Coahuila, Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Tamaulipas, Chihuahua y Sinaloa, informó el sitio web CNNexpansión.com.
Esta última entidad saltó ocho posiciones en los últimos dos años y se coló por primera vez en el cuadro de honor de los primeros 10 estados. Del total de las inversiones realizadas en México, estas 10 entidades se llevan 80.5%.
En el grupo élite sólo uno ha conservado la corona por 10 años consecutivos en el ranking del IMCO: el DF.
Su posición le ha dado acceso a inversiones por poco más de 8,000 mdd en 2009.
Su lugar lo mantiene gracias a que la capital mexicana presenta las mejores condiciones para que las empresas nacionales y extranjeras se instalen.
Incluso a pesar de sus grandes desafíos en temas de seguridad, buen gobierno y sustentabilidad.
Su competitividad la ha llevado a compartir con São Paulo, Brasil, las dos primeras posiciones como los mercados financieros más importantes de Latinoamérica.
Estar en el Top 10 es resultado del trabajo de cada estado para atraer y retener inversiones en capital fijo.
Este grupo concentra 42.4% del Producto Interno Bruto y tiene 30% de los clientes potenciales del país.
Lo que distingue a estas entidades es que tienen los mejores puntajes en sociedad incluyente; un grado promedio de escolaridad de 9.2, frente a la media nacional de 8.4; y 25.4% de su Población Económicamente Activa cuenta con estudios superiores.
Aguascalientes ocupa la quinta posición del índice al tener los niveles más bajos de analfabetismo y el séptimo lugar con mayor número de hogares con acceso a internet.
Los estados que se ubicaron a la cola del ranking del IMCO son Oaxaca, Guerrero, Chiapas y el Estado de México.
Otro elemento común en el Top 10 es el avance de los sectores precursores de clase mundial, factor que incluye subvariables como infraestructura física y de telecomunicaciones, en las que Nuevo León, Baja California Sur y el DF ocupan las primeras posiciones.
Estas tres entidades actualmente están desarrollando 16 proyectos de infraestructura física con un monto de inversiones de 21,000 millones de pesos, de acuerdo con datos del Plan Nacional de Infraestructura 2007-2012.
Un gobierno eficiente y eficaz también aparece como uno de los indicadores de mayor importancia.
Además, el Top 5 de las entidades más competitivas concentra 53% de las patentes y 49% de los investigadores registrados en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI).
A continuación el análisis FODA (fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas), de la región Sur-Sureste, realizado por la revista Expansión con información del IMCO, Boston Consulting Group y cada uno de los estados.
Las entidades que conforman esta región son: Puebla, Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán.
Acrónimo del FODA
(F) Fortalezas
– Diversidad de recursos naturales.
– Importante inversión pública para desarrollar infraestructura.
– Potencial turístico por zonas vírgenes y reservas naturales.
– Potencial para el establecimiento de agroindustrias.
(O) Oportunidades
-Turismo, petroquímica, minería, agricultura y alimentos procesados.
(D) Debilidades
– Altas tasas de analfabetismo y rezago educativo.
– Debilidad en la percepción de su sistema judicial.
– Carencia en algunas zonas de servicios como drenaje, energía y agua potable.
– Bajo nivel de productividad laboral.
– Infraestructura física y financiera insuficiente.
– Atraso en telecomunicaciones.
(A) Amenazas
– Fragilidad del Estado de Derecho y violación de los derechos humanos.
– Ausencia de políticas estatales y regionales de desarrollo sectorial y urbano.
– Poca transparencia de la gestión pública.
– Falta de vías de comunicación con el resto del país.
– Altos niveles de corrupción.
(Fuente: SIPSE/Novedades de Quintana Roo)
