CANCÚN, MX.- La crisis que ha venido enfrentando el destino por los efectos de la contracción económica global, ha incrementado el endeudamiento de hoteles y desarrollos turísticos en los últimos años, por lo que no se descarta la posibilidad de que más hoteles entren a la venta o cambien de dueño en lo que resta del año.
CANCÚN, MX.- Con la llegada de “septihambre” y la drástica caída en los índices de ocupación hotelera, el sector implementa toda clase de estrategias que permitan sostener la demanda dentro de parámetros aceptables, tales como reducción de tarifas, que oscila entre un 20 y un 50 por ciento en algunos casos, promociones enfocadas al mercado nacional y atractivos paquetes o plus adicionales en la estancia de los huéspedes.
Algunos centros de hospedaje en la zona de playas ofrecen tarifas realmente bajas en comparación con las que manejan durante los meses considerados como de mayor demanda, que en su mayoría se publicitan a través del Internet o directamente con agencias de viajes.
Por ejemplo, el hotel Gran Solaris Cancún, de cinco estrellas, promociona la tarifa especial de una semana de estancia del 13 al 20 de septiembre, con motivo de las fiestas de la Independencia, a un costo de 16 mil 797 pesos, cuando su precio normal es de 26 mil 129, para dos adultos, en régimen todo incluido.
El Solymar Cancún ofrece un descuento del 20 por ciento, en tanto que el Presidente Intercontinental, de cinco estrellas, ofrece un descuento del 26 por ciento a sus huéspedes, mientras que los turistas pueden hospedarse en el Royal Solaris de cinco estrellas, con un 30% de descuento.
Si prefieren el Westin Cancún también de cinco estrellas, se verán beneficiados con un 25% de descuento, en tanto que si deciden celebrar el Grito de la Independencia en Le Meridien Hotel Cancún, de gran turismo, obtendrán un 12 % de descuento.
Estas son sólo algunas de las ofertas que pueden encontrarse en nuestro destino durante el mes de septiembre, cuando la ocupación hotelera disminuye de modo impactante y la zona de playas se ve desolada, ante la falta de visitantes.
Otras estrategias utilizadas por el sector hotelero son las promociones enfocadas al mercado nacional con paquetes que incluyen uno o dos tours, una noche gratis, desayuno incluido o dos niños gratis, por poner varios ejemplos.
El sector hotelero considera como algo normal la competencia entre centros de hospedaje por ofrecer las tarifas más bajas y es una medida que ha puesto en práctica desde hace muchos años, incluso cuando en las temporadas bajas no se presentaban las funestas cifras que se registran en la actualidad.
La Asociación de Hoteles de Cancún considera que durante esta temporada baja habrá semanas en las que se registren ocupaciones inferiores al 50%, aunque estimó que durante el fin de semana alusivo a las fiestas patrias los índices de ocupación puedan rayar en el 70 por ciento.
En tanto que la mayor parte de los empresarios hoteleros considera que además de reforzarse la promoción en los mercados nacionales, no se debe bajar la guardia con Estados Unidos segmento tradicional, esto debido a que a pesar de la crisis por la que pasa el vecino país aún hay muchos turistas que se encuentran en condiciones de viajar.
De la misma manera apuestan por Canadá, donde el frío comienza a hacer su aparición y por este motivo muchos turistas potenciales buscan climas más cálidos.
Y también consideran como muy bueno el mercado de Brasil, prácticamente el único país de América Latina que ha logrado sortear los estragos de la crisis mundial.(Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
Entre las ventas más recientes que se han dado, se retoma la venta del hotel Hilton, que pasó a manos de la cadena española Iberostar, pero se menciona que también hoteles como los Fiesta Americana, que controla el Grupo Posadas, estarán pasando el mismo efecto para recapitalizar a la empresa.
Rafael del Río, consejero de la Asociación de Hoteles de Cancún (AHC) y asesor de la Asociación de Clubes Vacacionales del destino (Acluvac), señaló que si bien el destino mantiene sus expectativas de ocupación estables para la temporada de otoño, con ocupaciones del 48 al 50% en términos generales, reconoció que la crisis que se ha venido enfrentando ha obligado a algunos desarrollos a aplicar medidas adicionales en sus tarifas para mantenerse en el mercado turístico.
La caída de tarifas, apuntaló, no es generalizada y por lo general se concreta en los desarrollos que enfrentan un nivel de endeudamiento mayor, ya que se prefiere sacrificar el precio para elevar la ocupación y pagar el adeudo, a tener más cuartos vacíos y seguir con la crisis.
En este sentido, señaló que algunos hoteles tienen endeudamientos importantes que vienen arrastrando desde hace años, y aunque no mencionó cuántos ni cuáles de estos desarrollos en Cancún podrían tener este problema vigente, ya que esta información sólo se da en el manejo interno de cada empresa, el consejero sí señaló que son varios los que están en estas condiciones.
Ante ello, no descartó la posibilidad de que algunos hoteles entren a venta directa en lo que resta del año, dadas las condiciones actuales del mercado.
Cabe señalar que los últimos movimientos que se han registrado de venta de hoteles, se reflejan con el caso del hotel Hilton y los que se anticipan de los hoteles de Fiesta Americana del Grupo Posadas, que también ya están en oferta al mejor postor en busca de recapitalizar a la empresa.
Aunque muchos de estos hoteles, lo único que hacen con la venta es cambiar de marca, la mayoría de las infraestructuras suele tener en este proceso una renovación de sus inventarios y de sus conceptos, lo que finalmente es favorable para el destino e inyecta capital fresco a la inversión que se sostiene.
En cuanto al mercado internacional y los efectos que pudiera dejar al destino con el vaivén que vuelven a mostrar las principales bolsas, el asesor del sector turístico consideró que para el caso de Cancún, las expectativas de ocupación se siguen manteniendo en el otoño y se verán operaciones del 48 al 50% en lo que resta de la temporada, sin ningún tipo de efecto mayor.
Sin duda, refirió que los movimientos que muestran las bolsas internacionales, es reflejo de esa desconfianza que existe o prevalece y que obliga al consumidor a mantenerse más cauto, reduciendo sus gastos y evitando endeudamientos mayores por temor a una nueva recesión.
Este efecto de desconfianza, sin embargo, se espera que se disemine con una recuperación franca del mercado estadounidense cuando se apliquen las medidas para generar mayor empleo y acelerar la economía.
El presidente Obama, señaló el analista, tendrá que reunirse con la clase empresarial de su país para activar estas propuestas y generar empleos que den un respiro a su economía. Con estos factores se tendría un efecto inmediato de recuperación que se podría estar sintiendo nuevamente para las próximas temporadas. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)