CANCÚN, MX.- El mecánico Jesús Reynaldo Valdez Gil detenido en el lugar donde fueron encontrados los tres ejecutados del lunes, confesó trabajar para el grupo de “Los Zetas” y por eso los sicarios lo llamaron a él cuando se descompuso la camioneta en la que llevaron los cuerpos, que siguen sin ser identificados.
CANCÚN, MX.- La triple ejecución es atribuida a la narcocélula de “Los Zetas” como parte de la persecución sangrienta que prevalece contra narco-distribuidores independientes y que a últimas fechas han sido detectados sin pagar las cuotas respectivas y por salirse de las filas de los grupos establecidos, que controlan y operan la distribución de cientos de dosis de droga en regiones y ciudad de Cancún.
Y aunque hasta el momento aún no se ha logrado realizar la identificación de los tres sujetos que este lunes fueron hallados en terrenos de la colonia irregular Generación 2000, ubicado por la carretera que conduce a la ciudad de Mérida, Yucatán, ya se dio a conocer que todo fue por una ajuste de cuentas producto de la venta de droga.
Y eso es debido a que en el mismo lugar de los hechos fue detenido Jesús Reynaldo Valdéz, de oficio mecánico quien confesó trabajar con “Los Zetas” y que se encontraba ahí, porque acudió a reparar los vehículos que se averiaron, donde fueron trasladados los cuerpos de los ejecutados, el cual hasta el momento ha sido pieza clave para las autoridades para poder establecer el móvil de esta triple ejecución.
Entorno al caso el Procurador de Justicia del Estado Gaspar Armando García Torres, dio a conocer la noche de ayer, algunos de los avances tras la detención de Jesús Reynaldo Valdez.
En ese sentido; comentó, que gracias a la detención de esta persona se han logrado obtener los alias de los sujetos que participaron en este triple homicidio, que se sabe son; “El Tucán y/o Ropas, Escorpión y el Moncho”, son los sujetos que según se encontraban en la escena del crimen y huyeron al ver llegar a las autoridades.
También dio a conocer que el motivo de la ejecución de estos tres sujetos fue por robarse dinero del grupo delictivo de “Los Zetas”, producto de la venta de drogas, de quienes hasta el momento solo se han logrado obtener sus alias de cada uno de ellos, los cuales eran conocidos como; “Jeremías, Chocky y Caricaturas”.
Asimismo, dio a conocer que Reynaldo Valdez, ya declaro ante el ministerio público y aporto información importante que esta ayudando a las autoridades a poder ubicar a los sicarios de este triple homicidio.
Mientras tanto en relación a las tres unidades automotrices que fueron aseguradas en el lugar de la triple ejecución, Armando García Torres dijo que hasta el momento ninguna ha sido verificada con reporte de robo, pero se esta investigando a quienes pertenecen, o si pudieran estar relacionadas con mas actos ilícitos.
Por otra parte es necesario señalar que la distribución y compra-venta de droga, representa un negocio de miles de pesos, para “Los Zetas” que controlan decenas de narcotienditas y numerosos puntos de venta.
En esos sitios de distribución se realiza la entrega por semana de cientos de dosis de droga.
Incluso tan sólo un proveedor puede realizar la entrega hasta de 200 dosis de droga, desde piedras de crack hasta cocaína.
Las narcotienditas se encuentran ubicadas en regiones como Corales, Donceles, Lombardo Toledano, hasta las regiones 200 y 100. Y más aún llegan a ubicarse en los mismos asentamientos irregulares.
De ahí que la sangrienta persecución contra tiradores independientes, sea ardua y constante, porque son vendedores de droga que realizan sus operaciones sin pagar las cuotas establecidas a las narcocélulas.
Y agrupaciones delictivas como “Los Zetas” se han dado a la tarea criminal de ubicar y castigar con ejecuciones, previa tortura, a los sujetos que se dedican a vender de forma independiente.
El mortal ejemplo de esta abierta cacería contra “Chapulines” apodo como se les conoce a los narcodistribuidores independientes, es la triple ejecución perpetrada y descubierta este lunes. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
Mientras tanto, la hermana del taxista Juan Diego Farfán Peraza, quien se encuentra desaparecido y cuyo nombre aparecía en el teléfono celular que llevaba Ricardo Daniel Rodríguez Villasana al momento de ser ejecutado frente al hotel “Ibis” la semana pasada; creyó que uno de los tres ejecutados era su hermano, pero al ver los cuerpos aseguró que no se trataba de ninguno de ellos.
La necropsia practicada a los cuerpos, confirmó que uno de ellos fue degollado, en tanto que a los otros dos, los mataron a golpes en la cabeza al parecer hechos con un martillo.
Luego del hallazgo de los tres ejecutados dentro de la colonia “Generación 2000”, el Ministerio Público del Fuero Común inició la averiguación previa 1532/2012, por el delito de homicidio contra quien o quienes resulten responsables.
La Policía Judicial del Estado (PJE) dio a conocer que el día en que fueron encontrados los cuerpos, en el lugar de los hechos entrevistaron a un hombre que les explicó que alrededor de la una de la madrugada del día martes logró ver cuando ingresaban a la colonia una Courier sin placas de circulación con cuatro personas a bordo y un automóvil tipo Focus con placas de circulación UUW-8236 con dos sujetos a bordo.
Dijo que las dos camionetas -ambas de color blanco-, entraban a la colonia y esto le pareció muy extraño, pues al final del camino ya no hay casas.
Después de media hora los vio salir, pero sólo a cuatro de ellos caminando y estos sujetos regresaron nuevamente al lugar alrededor de las 13:00 horas.
El testigo jamás se imaginó que los vehículos que vio ingresar, eran tripulados por sicarios y que antes, ya había ingresado la camioneta tipo Expedition en la que llevaban los tres cuerpos sin vida.
Cuando los vio regresar por la tarde, entre ellos iba ya el mecánico Jesús Reynaldo Valdez Gil, a quien los sicarios fueron a buscar para que arreglara la camioneta que se averió justo después de haber tirado los cuerpos de los tres ejecutados.
Como la camioneta Expedition rotulada como taxi con número económico 3739 y placas de circulación 39-37-TNA, se quedó en el lugar toda la madrugada y parte del día, fue reportada como abandonada y fue entonces cuando elementos de la Policía Municipal se acercaron al lugar.
Ahí encontraron al mecánico laborando, acompañado de tres sujetos más quienes lograron darse a la fuga al ver a los policías.
En un principio, el mecánico aseguró que él sólo había ido a prestar un servicio sin saber lo que había pasado, pero al ser interrogado por la policía; confesó ser parte del grupo delictivo de “Los Zetas”.
Dijo que trabaja para ellos y que conocía a los sujetos que lograron escapar como Roberto Ramírez Castillo, “Moncho”, “Scorpion”; “El Tucán y/o Ropas, quienes forman parte del mismo grupo delictivo y fueron los encargados de ir a tirar los cuerpos.
Al huir los sicarios, quedaron en el lugar la camioneta Expedition, la camioneta Courier y un vehículo tipo Focus.
Ya después de que fueron encontrados los cuerpos y cuando los peritos se encargaron de revisar los vehículos que quedaron ahí abandonados, encontraron dentro de la camioneta tipo Courier un gafete que acreditaba como trabajador de un medio de comunicación a Roberto Ramírez Castillo.
En la camioneta Expedition, los peritos encontraron manchas de sangre en la rueda delantera del lado derecho y en la cajuela.
En el interior encontraron cintillas de plástico blancas, similares a las que usaron para amarrar los cuerpos y tres carteras de piel. En una de ellas se encontró una credencial de elector a nombre de Heidi Guadalupe Yam Quen.
Necropsia
La Subprocuraduría de Justicia informó que la necropsia practicada a los cuerpos reveló que el primero que vestía playera negra y bermuda color beige, corresponde a un hombre de aproximadamente 30 años de edad, de 130 kilos de peso y falleció a las 2:30 horas de ese mismo día. Este cuerpo, presentaba varias heridas en el cuello, así como múltiples lesiones en el cuerpo hasta que finalmente fue degollado.
Los otros dos cuerpos corresponden a dos hombres de 26 y 30 años de edad aproximadamente y ambos fallecieron a la 1:30 horas del mismo lunes.
En el caso de estos dos occisos, presentaban también múltiples lesiones en el cuerpo, pero fueron ejecutados a golpes en la cabeza que fueron realizados al parecer con martillos, pues los cráneos presentaban fracturas severas y hundimiento de piel.
Sin identificar los cuerpos
Ayer por la mañana, Carolina Farfán Peraza se presentó en la Subprocuraduría de Justicia para tratar de identificar a alguno de los ejecutados.
Y es que su hermano Juan Diego Farfán Peraza de ocupación taxista, se encuentra desaparecido desde hace varios días y temía que se tratara de alguno de los ejecutados.
La mujer acudió al Servicio Médico Forense (Semefo), en donde le fueron mostrados los tres cuerpos.
Después de verlos, determinó que ninguno de ellos era su hermano, por lo que los tres ejecutados continuaban hasta ayer por la tarde en calidad de desconocidos.
Juan Diego Farfán Peraza es el nombre del taxista que fue encontrado entre los contactos del teléfono celular de Ricardo Daniel Rodríguez Villasana, ejecutado el martes de la semana pasada en la Supermanzana 11 frente al hotel “Ibis”.
La Policía Judicial del Estado (PJE) continúa investigando, para tratar de determinar si esta triple ejecución tiene o no relación, con la de Rodríguez Villasana.
Incluso trascendió que el día en que el joven coahuilense fue ejecutado, se encontraba comiendo en un restaurante con otros tres sujetos, quienes al ver a los sicarios lograron darse a la fuga y sólo alcanzaron a Rodríguez Villasana. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
CANCÚN, MX- La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó que la ejecución de los tres sujetos hallados ayer en una área verde de la colonia “Generación 2000” fue debido a que éstos robaron dinero del grupo delictivo “Los Zetas”, producto de las ventas de drogas. Asimismo, dio a conocer que aún no han sido identificados oficialmente, pero se tiene los alias de “El Jeremías”, “El Chocky” y “El Caricaturas”.
Al respecto, el titular de la citada dependencia, Gaspar Armando García Torres, señaló que los avances en las investigaciones se obtuvieron gracias a la detención de un sujeto de oficio mecánico, Jesús Reynaldo Valdez, mismo que ya rindió su declaración y aportó datos importantes como los alias de los presuntos sicarios, como “El Tucán” y/o “Ropas”, “Escorpión” y “El Moncho”.
En este tenor, explicó que esta mañana acudió ante las autoridades una mujer quien dijo que uno de los occisos es su hermano, de nombre Juan Diego Farfán Peraza, de 44 años de edad, originario de Valladolid, Yucatán. La fémina indicó que regresaría con los documentos correspondientes para que le entreguen el cadáver, pero hasta el cierre de esta edición no lo había hecho.
Asimismo, autoridades judiciales comentaron que se inició la averiguación previa 1532/2012 por el delito de homicidio en agravio de tres personas.
Hasta el momento no han informado en relación a los vehículos asegurados en el lugar de los hechos.
Aunque aún no se ha establecido el móvil del crimen, las autoridades aseguran que los ejecutados podrían ser “chapulines” (vendedores independientes de drogas) que se negaron a alinearse a algún grupo delictivo.
Cabe recordar que el crimen se registró ayer, cuando un vecino de la colonia irregular “Generación 2000” informó a elementos policiacos que había hallado tres cuerpos en la maleza y que cuatro sujetos que viajaban en cuatro vehículos merodeaban la zona.
En el lugar, agentes policiacos detuvieron a Jesús Reynaldo Valdez, presunto mecánico que se iba a encargar de reparar tres de las unidades reportadas anteriormente.
Una de ellas, una camioneta Expeditión color blanco con número económico 3739 y placas 39-37-TNA, presentaba en la rueda delantera del lado derecho manchas de sangre, así como en la cajuela, además de que en su interior encontraron cintillas de plástico, tres carteras de piel, una de ellas con credencial de IFE a nombre de Heidi Guadalupe Yam Quen, dato con el que actualmente trabajan las autoridades.
NECROPSIA
De acuerdo con la necropsia realizada a los tres cuerpos, las autoridades periciales informaron que Juan Diego Farfán Peraza, 42 años de edad, fue ejecutado cerca de las 02:30 horas del lunes. Presentó heridas en el cuello por objeto cortante y múltiples lesiones realizadas con algún objeto contundente y con arma blanca.
El segundo cuerpo, de 26 años aproximadamente, falleció a la 01:30 horas del mismo día. Presentó hemorragia intracraneal, lesión de encéfalo y traumatismo craneoencefálico y de cara. Fue el cadáver con más lesiones en la cabeza, según confirmó la necropsia.
El tercer cuerpo, de 30 años aproximadamente, falleció a las 01:30 horas, presentó hemorragia intracraneal, lesión de encéfalo y trauma craneoencefálico y de cara. Ninguno de los ejecutados fue ultimado con arma de fuego, como transcendió la tarde del lunes. (Fuente: Diario de Quintana Roo)