CHETUMAL, MX.- Después de que Fitch Ratings bajó la calificacion crediticia del municipio de Othón P. Blanco que preside Carlos Mario Villanueva Tenorio, también la calificadora HR Rating asignó el más bajo nivel de confianza (a HR D de HR BBB”) a su calificación crediticia y la colocó en “revisión especial”.
Adicionalmente, colocó en observación negativa el crédito estructurado calificado por HR Ratings de dicha entidad, dio a conocer mediante un comunicado fechado el pasado 15 de enero.
La calificación de HR D significa que el emisor tiene “la más baja calificación crediticia”, ya sea que se encuentra en default o es altamente probable que caiga en incumplimiento de pago de las obligaciones de deuda en el corto plazo.
La revisión especial -se explica- es como consecuencia al seguimiento que dará esta agencia calificadora a las posibles negociaciones entre el municipio y sus acreedores.
HR Ratings reveló que la baja en la calificación crediticia refleja el incumplimiento en el pago de cadenas productivas desde noviembre de 2012 con 3 bancos comerciales: BBVA Bancomer, Banco Ve por Más, y Banorte por un monto aproximado de 14 millones de pesos, 11 millones de pesos y 8 millones de pesos, respectivamente, es decir, dejó de pagar 33 millones de pesos por créditos con la banca comercial.
Esta información, cita el comunicado, fue corroborada con funcionarios del municipio el día 15 de enero de 2013.
Hasta el momento HR Ratings no tiene conocimiento alguno de que se haya resarcido dicha situación de impago.
El último pronunciamiento realizado por HR Ratings se realizó el 2 de octubre de 2012, bajando la calificación a HR BBB- bajo perspectiva negativa de HR BBB con perspectiva estable.
Algunas de las principales limitantes mencionadas en dicho reporte eran el crecimiento del déficit financiero equivalente al 30 por ciento de los Ingresos Totales al cierre de 2011, así como el uso continuo de créditos de corto plazo.
De acuerdo a la estimación del municipio de cierre de 2012, se presenta un déficit equivalente al 22% de los Ingresos Totales, principalmente por disminución en la recaudación de Ingresos Propios e Ingresos Federales.
La Deuda Bancaria, sin incluir cadenas productivas, a diciembre de 2012 asciende a 236.5 millones de pesos (41% respecto a los Ingresos Totales) de los cuales 167.8 millones de pesos son de largo plazo, 130 millones del crédito de IDEFIN y 37.8 millones de pesos con Banobras.
En cuanto a créditos de corto plazo, $50 millones de pesos con Banco Interacciones (con vencimiento el 31 de enero 2013), $3.1 millones con Bancomer y $15.5 millones con Integradora de Apoyo Municipal (SOFOM).
Los dos últimos, de acuerdo a conversaciones con el municipio, se encuentran re-documentados.
Por otra parte, en noviembre de 2012, el congreso autorizó a la entidad contratar deuda a largo plazo por 272 millones de pesos. Sin embargo, el crédito no fue dispuesto en 2012 y se espera que sea durante el año en curso. El destino de estos recursos
HR Ratings monitoreará la evolución de la situación financiera de la entidad, en particular sus niveles de liquidez y las acciones que lleve a cabo. Primero, para subsanar la condición de impago y segundo para estabilizar la hacienda municipal antes de septiembre 2013, fecha en la cual se realiza el cambio de administración.
En la opinión de esta agencia calificadora el Municipio de Othón P. Blanco revela “malas prácticas financieras y un bajo nivel de transparencia”.(Noticaribe)
SEÑALAN QUE “EXCESOS” DE CARLOS MARIO LLEVAN AL OPB A LA RUINA
CHETUMAL, 20 de enero.- El empecinamiento del alcalde Carlos Mario Villanueva Tenorio en mantener una inaceptable nómina obesa en el Ayuntamiento de Othón P. Blanco, a pesar de la advertencia de los regidores de que no habían recursos suficientes para mantenerla, es una de las causas principales del desastre financiero municipal.
Villanueva Tenorio recibió el gobierno municipal con alrededor de 2 mil 200 trabajadores, pero en menos de un año la aumentó a 2 mil 900, por lo que, al momento de analizar la cuenta pública de 2011, los regidores cuestionaron que era insostenible mantener este número de personas.
Sin embargo, el presidente municipal siguió incrustando personal en la nómina, por lo que llegó el momento a mediados de 2012 cuando había más de 3 mil personas cobrando sueldos porque supuestamente estaban prestando sus servicios a la Comuna
En este sentido, es necesario mencionar que fuentes confiables al interior de la Dirección de Recursos Humanos de la comuna confirmaron que, en un punto de esta administración, Carlos Mario Villanueva Tenorio tenía poco más de mil personas incrustadas de más a la nómina, es decir, que el gobierno municipal tuvo más de 3 mil 100 empleados en algún punto durante el año pasado.
De hecho esta información coincide con una declaración realizada por el actual tesorero municipal, Joel Sauri Galué, en el sentido de que a su llegada al Ayuntamiento se encontró con una nómina superior a los 3 mil trabajadores, situación inaceptable para un municipio como Othón P. Blanco.
“A mi llegada a la tesorería, nos encontramos una nómina un poco mayor a 3 mil gentes, lo que era inaceptable tomando en cuenta el presupuesto”.
Por ello, desde la llegada de Sauri Galué en septiembre, hasta la fecha han tramitado más de 550 bajas de la nómina, que se sumarán a otras 500 que se realizarán durante este 2013.
El objetivo, de acuerdo al tesorero, será la reducción del 33 por ciento de personal de la nómina, es decir, unas mil personas menos, lo que también confirma que el gasto irracional del presidente municipal llevó a la comuna al desastre financiero.
Por consiguiente, el gobierno municipal enfrenta serios problemas de liquidez para cumplir con los pagos de salarios y prestaciones de la clase trabajadora, lo que ha tenido repercusiones como el reciente paro de labores de los trabajadores sindicalizados tras los atrasos en sus pagos.
El gasto irracional de Carlos Mario Villanueva Tenorio en beneficio de sus recomendados y cientos de personas que ingresó a la nómina para cumplir compromisos políticos, así como la toma de decisiones financieras erróneas al sobreendeudar a la comuna, tienen hoy desahuciado al Ayuntamiento de Othón P. Blanco, que como única salida espera obtener un préstamo de 272 millones de pesos para salir de sus deudas.
Los verdaderos afectados de este problema causado por la incapacidad de Villanueva Tenorio son los ciudadanos que carecen de mejores servicios municipales y los propios trabajadores de la comuna, que no tienen certidumbre sobre sus salarios.
Esta incertidumbre financiera fue provocada porque el presidente municipal infló irresponsablemente la nómina y cometió otros excesos de su administración, como contar con asesores que cobraban 70 mil pesos mensuales.
Como se recordará, ante la nómina obesa, el Cabildo se vio obligado a aprobar un nuevo organigrama del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, que desaparece 13 de 17 direcciones generales que existían, dejando sólo cuatro, así como establece la desaparición de 46 puestos de mandos entre direcciones, jefaturas de departamento y coordinaciones.
En reestructuración administrativa también se aprobó la extinción del Instituto Municipal de Planeación (Implan) por su nulos resultados, el cual fue creado por esta administración a propuesta de Luis Ortiz Cardín, que fue incapaz de hacer al instituto funcional y pretendió renunciar a su cargo como director en meses pasados, sin asumir su responsabilidad.
También se aprobó la extinción del Instituto de la Calidad de Vida (Incavi), creado por la administración pasada, además de la desaparición del órgano descentralizado de la Funeraria Municipal, por duplicar funciones con una dirección dependiente de la Secretaría General. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)