CANCÚN, MX.- Como exagerada y sin fundamentos reales calificaron autoridades de turismo la alerta que difundió Stratford para el springbreaker.
El director de Turismo municipal, Máximo García Rocha, cree que la situación que describen en su informe es muy ajena a la que viven los turistas en la zona de playas, como lo pueden comprobar los más de 3 millones de viajeros que visitan el balneario.
El también turistero no cree que los estudiantes que ya pagaron sus viajes cambien de parecer de un momento a otro porque una calificadora de seguridad les diga que el balneario no está exento de incidentes criminales.
De igual forma le parece sospechoso que el único destino que se menciona libre de problemas sea Los Cabos, muy cerca de los Estados Unidos , en el entendido de que quien llegara a planear sus vacaciones en función de este boletín, elegiría ese destino en particular.
Asimismo no descarta la posibilidad de que esa información esté preparada a modo para beneficiar a los destinos turísticos de la Unión Americana. En el pasado, cuando Texas emitió por cuenta propia sus propios boletines sobre el riesgo de viajar a Cancún, argumentando razones de seguridad, desde la OVC adelantaron que no dejarían de llegar estudiantes por esos avisos, como realmente sucedió.
Según Stratford ninguno de los principales destinos turísticos en México está exento de la violencia relacionada con el crimen organizado, lo que representa un grave riesgo para los vacacionistas que visitan el país durante la temporada conocida como “spring break”.
Si bien no hay evidencias de que los cárteles de la droga fijen sus objetivos en los turistas, la expansión de las actividades del narcotráfico a lo largo y ancho del país elevan las posibilidades de que los viajeros puedan encontrarse en un fuego cruzado o estar expuestos a situaciones de violencia, señala un nuevo reporte de la firma Stratfor.
“El puerto de Cancún se mantiene como un importante punto de entrada de drogas provenientes de Sudamérica en su trasiego hacia los Estados Unidos.
Los Zetas se mantienen muy activos en la zona, con un flujo constante de drogas y extranjeros que entran en los anillos de tráfico desde Colombia, Venezuela, Cuba y otros puntos del Caribe.
Los conflictos entre organizaciones criminales en este centro turístico se han hecho más frecuentes”, acotan. (Fuente: Diario de Quintana Roo)
