El planeta seguirá cocinándose
Paul Krugman, Premio Nobel de Economía
El cambio climático ha causado más muertes que el terrorismo internacional
José Luis Rodríguez Zapatero
Esta semana, del 11 al 19 de noviembre, se celebrará la Décimo Novena Conferencia de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 19, por sus siglas en inglés) en Varsovia, Polonia. Asistiremos 350 representantes de gobiernos, parlamentos, organizaciones de la sociedad civil y especialistas de más de 80 naciones.
La agenda es amplia: abordaremos temas relacionados con la inversión en fuentes de energía, la sustentabilidad de tecnologías con bajo uso de carbón, el desarrollo tecnológico, la cooperación para la economía verde y el desarrollo sustentable de las ciudades, entre otros.
Para México es vital avanzar en el conocimiento y cooperación activa en las acciones de control del cambio climático, pues -sabemos- sus efectos negativos ya se sienten en muchos campos de la vida de nuestro país: el incremento en el número de huracanes y ciclones, así como de sequías, ha significado graves costos económicos y, más importante, pérdidas humanas.
Ningún país es inmune a los efectos del cambio climático. Sin embargo sabemos que América Latina y el Caribe es una de las zonas más castigadas por los cambios climáticos, a pesar de que sólo es del 12.5 por ciento de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.
Estudios del Banco Mundial revelan que, de continuar la tendencia al calentamiento global, en unas décadas se elevará el nivel del mar entre cincuenta centímetros y un metro, con lo que desaparecerán pequeñas islas y algunas playas. Además, se registrará un mayor número de tormentas tropicales y huracanes, mientras que en otras zonas habrá sequías prolongadas que reducirán las superficies de cultivo.
En México, durante los dos últimos años hemos dado pasos relevantes para enfrentar con visión estratégica los retos del cambio climático.
Desde junio de 2012, contamos con una Ley General del Cambio Climático que, entre otras cosas, garantiza el derecho a un medio ambiente sano; establece la concurrencia de facultades entre los tres niveles de gobierno: federal, estatal y municipal; regula las emisiones de gases y compuestos de efecto de invernadero así como las acciones para la mitigación y adaptación del cambio climático, y fomenta la educación, la investigación y el desarrollo de tecnologías.
Asimismo, como resultado de la ley, en 2013, por primera vez en México se cuantificaron los recursos presupuestales para la mitigación y adaptación de los efectos del cambio climático.
En 2013, se destinaron 34,514,794,262 de pesos a estas tareas. La mayor parte de ellos (11,483,927,182 pesos) corresponde al Ramo 16 “Medio Ambiente y Recursos Naturales”; le siguen el ramo 8 “Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación” con 10, 730,000,000 pesos, en tercer lugar, se encuentra el ramo 23, con 5,830,807,975 pesos, relativos al Fonden, mientras en cuarto lugar se ubicó a PEMEX, con 3,533,988,992 pesos.
El programa con menos recursos asignados fue el ramo 38 fue el ramo “Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología”, con 150, 000 pesos. Sin duda, la reunión internacional en Varsovia nos permitirá avanzar en el análisis y aprendizaje de las experiencias positivas y negativas en materia de cambio climático y medio ambiente.
Es una tarea en la que todos -gobierno, legisladores, empresarios y ciudadanos tenemos una responsabilidad: cuidar el futuro de muchas generaciones.
*Senador por Yucatán. Secretario de las comisiones De Juventud y Deporte,
De Relaciones Exteriores Asia-Pacífico y del Instituto Belisario Domínguez. Integrante de las comisiones de Turismo, Reforma Agraria y Bicamaral del Canal del Congreso.
