CHETUMAL, MX.- Es un hecho que ante la ineficacia, sumisión y complicidad de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (Sintra), los afiliados del Sindicato Unico de Chóferes de Automóviles de Alquiler (Suchaa) impusieron de manera ilegal un incremento a la tarifa mínima de los taxis en la capital del Estado, aumentándole dos pesos en este inicio de año, pasando de los 14 a los 16 pesos.
Era un secreto a voces que desde finales del año pasado ningún trabajador del volante respetaba ya la tarifa, que marca la mínima en 14 pesos, que se encuentra marcada en su tabulador. Ante la grave situación económica por la que atraviesan miles de chetumaleños, la ciudadanía decidió hacer mutis y pagar ese peso de más.
Sin embargo, el Suchaa, encabezado por Eliezer Argüelles Borges, se pasó nuevamente por el “arco del triunfo” a la Dirección de Comunicaciones y Transportes de la Sintra, encabezada por Javier Zetina González, y ha consentido que sus agremiados se encuentren cobrando dos pesos más, es decir, 16 pesos como tarifa mínima.
Esto fue confirmado tanto por usuarios como por los propios taxistas, mismos que molestos e incluso angustiados, comentaron que ante los gasolinazos y el incremento en precios de las refacciones ya no sacan “ni para la cuenta”, lo que los orilla a poner de su bolso dinero.
El problema radica en que este hecho no es el primero en donde Sintra se mantiene al margen, cuando se supone es la autoridad que debe actuar ante el tema, pues la alteración de tarifas sucedió durante los días 25 de diciembre y 1 de enero, y recientemente el Sindicato de Taxistas en Cancún también aplicó un incremento unilateral e ilegal.
En los dos primeros casos, en los días de las festividades, los taxistas incrementaron incluso en más del doble el precio de sus costos bajo el argumento de que se encontraban autorizados por el sindicato para pedir su aguinaldo.
En el tercer caso, los taxistas de Cancún repentinamente comenzaron a cobrar una cuota mayor bajo diversos pretextos, sin que la Sintra lo haya autorizado.
Sin embargo, aunque la Sintra una y otra vez recalca que este tipo de abusos deben ser denunciados para ser sancionados, porque no hay ningún aumento de tarifas autorizado por el Gobierno del Estado, la dependencia no pasa de las palabras y ni aplica ninguna sanción para frenar los abusos que cometen los sindicatos de taxistas contra los usuarios.
Con el pretexto de que no existen denuncias de ciudadanos afectados, la dependencia que debería vigilar que los sindicatos de taxistas respeten la ley se “cruza de brazos”, siendo el títere de organizaciones como el Suchaa, del sindicato Andrés Quintana Roo y recientemente de Tiburones Rojos del Caribe, en donde un integrante protagonizó junto con personal de Sintra tremendo papel al intentar bajar de un vehículo a la actriz Demi Moore.
Sobra decir que nunca hay castigos o sanciones para las agrupaciones que atentan contra la economía familiar, por lo que estos abusos quedan impunes y prácticamente el arbitrario incremento de la tarifa del taxi quedará impuesto por la voluntad unilateral e ilegal del Suchaa, ante una Dirección de Comunicaciones y Transportes ineficiente, sumisa y cómplice. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)