Atribuyen a la devastación del manglar la aparición de cocodrilos en las playas

PLAYA DEL CARMEN, MX.- La devastación del manglar al norte de la ciudad, ha traído consigo la emigración de cocodrilos a otras zonas, razón por la cual en los últimos días se ha detectado la presencia de los saurios, sobre todo, en el balneario popular “Punta Esmeralda”, donde la principal recomendación por parte de Protección Civil es la de no meterse a nadar en el cenote ubicado en las inmediaciones del sitio.

La mañana de ayer, se recibió el reporte de que en el balneario Punta Esmeralda ubicado al norte de la mancha urbana, un cocodrilo de un metro y medio aproximadamente se encontraba nadando en las aguas saladas generando momentos de pánico entre los bañistas que a esa hora se encontraban en el sitio, por lo cual reportaron el caso a las líneas de emergencias, quienes enviaron a los elementos de Protección Civil al mando del director operativo, Lucio Salvador Arguea.

A la llegada de los elementos de Protección Civil, el saurio ya había emprendido la huida internándose entre el mangle que a simple vista presenta un avanzado deterioro, producto de la voracidad de los consorcios hoteleros del área que sin importarle en lo más mínimo devastan el hábitat de los cocodrilos Moreletti, los obligan a buscar refugio en lugares más seguros haciéndoles llegar hasta la mancha urbana.

Cabe hacer mención que a últimas fechas se han recibido múltiples llamadas en las que se reporta la presencia de los saurios en balnearios como Playa Mamitas, el Recodo y Punta Esmeralda donde se ha logrado asegurar a los reptiles que son enviados a las granjas ubicadas en la alcaldía de Puerto Morelos.

Una de las recomendaciones que la Dirección de Protección Civil lanza a la ciudadanía, es que eviten bañarse en el cenote ubicado en el balneario Punta Esmeralda, toda vez que es la zona más cercana a la zona de manglar devastado por un consorcio hotelero, sin embargo, adelantó que los animalitos resultan hasta cierto punto inofensivos, pues si se les molesta atacan pero si sólo se limitan a observarlos simplemente se pasean un rato en las aguas y se retiran de nuevo adentro de lo poco que queda del mangle. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)