CANCÚN, MX.- Con cinco ejecuciones -todas por arma de fuego-, culmina el primer mes del año y hasta ahora, cuatro de estas muertes continúan impunes, pues sólo hay un asesino detenido.
Incluso, en uno de los casos, la Policía Judicial del Estado (PJE) cuenta con nombre y datos del asesino, pero éste aún sigue prófugo.
Un violento inicio de año ha registrado Cancún, pues a lo largo del mes de enero que concluyó el día de ayer, varios fueron los hechos delictivos que se registraron.
Sólo en uno de los casos, la Policía Judicial del Estado (PJE) logró la captura del homicida, quien se encuentra ya recluido en prisión, después de confesar que había sido contratado para ejecutar a la víctima.
En otro de los casos, las autoridades cuentan con los datos del homicida desde el día que ocurrieron los hechos, pero hasta ahora el asesino continúa libre.
Enero 4.- Julio César García Mateo (a) “El Quesadilla”, se convirtió en el primer ejecutado del 2014, al fallecer en el Hospital General siete días después de que fuera herido con impactos de bala el 28 de diciembre, cuando se encontraba afuera de su domicilio en la Región 234.
Durante los días que permaneció hospitalizado, su delicado estado de salud le impidió declarar ante el Ministerio Público del Fuero Común y hasta ahora, nada se sabe de los dos sujetos que desde una motocicleta en movimiento le dispararon.
Enero 6.- Arturo Jesús Mata Canul fue el segundo ejecutado del año, cuando Saúl Córdoba Ramírez (a) “El Tipo” le disparó con una escopeta en la cabeza, cuando se encontraban en el rancho “El Trébol”, ubicado a la altura del kilómetro 296 de la autopista Cancún-Mérida.
A pesar de contar con todos los datos del homicida, éste aún continúa en libertad.
Enero 11.- El contador público Manuel Antonio Leal Zapata se convirtió en el ejecutado número tres en lo que va de este año, al fallecer en el hospital del IMSS de la avenida Cobá, después de cinco días de permanecer internado; a consecuencia de los impactos de bala que recibió cuando se encontraba en su domicilio en la Región 93.
Una de las balas le dañó un riñón el cual le fue extirpado y además, causó daños en el páncreas, lo que finalmente le provocó la muerte.
Del solitario sicario que lo atacó en su propio domicilio, nada se sabe.
Enero 16.- Cristóbal Sánchez Arias fue ejecutado a quemarropa en su domicilio, ubicado en el fraccionamiento Villas Otoch Paraíso en la Región 259.
Momentos después de su asesinato, la Policía Judicial logró la captura del homicida, quien fue identificado como Alberto Bautista Luis.
El homicida se declaró confeso y ante las autoridades ministeriales dijo que había sido contratado para ejecutar a Sánchez Arias, por un sujeto al que sólo identificó como “El Negro”, quien le ofreció cinco mil pesos los cuales nunca llegó a cobrar.
Enero 28.- Cinco días después de que fuera baleado cuando entraba a un gimnasio de la avenida Uxmal, Jaime Eduardo Villa Guerrero falleció en la clínica “Quirúrgica del Sur”, por complicaciones de las heridas recibidas.
Villa Guerrero, de 36 años de edad, fue herido de tres balazos en el gimnasio “California”, ubicado en la SM 24, los cuales hicieron blanco en un brazo y a la altura de la axila, y aunque fue llevado al hospital en estado consciente, no se recuperó de las heridas sufridas.
La víctima era propietario de casas de masaje y un lavadero de autos en Cancún y los disparos en su contra fueron atribuidos inicialmente a una presunta venganza relacionada con el “derecho de piso” que le obligaban a pagar al grupo delictivo de “Los Zetas”. Hasta ahora, la ejecución continúa sin resolver. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)