CANCÚN, MX.- Las acusaciones de familiares de Héctor Cacique Fernández, apodado “El Diablo”, carecen totalmente de fundamento y están fuera de tiempo, el caso está en manos de una autoridad competente y será la que determine si tiene responsabilidad o no, afirmó
 
El hoy funcionario municipal negó tratos personales como los que los familiares apuntan de una compraventa de plaza laboral y la supuesta tortura
 
El secretario municipal de Seguridad Pública y Tránsito del municipio de Benito Juárez, Arturo Olivares Mendiola, rechazó las acusaciones que familiares de Héctor Cacique Fernández, apodado “El Diablo” le imputan sobre supuestos nexos y tortura contra quien hoy está en prisión y bajo proceso por presunta responsabilidad en el caso de una multi ejecución ocurrida el año pasado.
 
Mediante un boletín de prensa, el jefe policiaco salió al paso a las acusaciones que desde hace dos días le han imputado y en donde se denunció el supuesto trato que tuvo con Héctor Cacique para venderle una plaza en la Policía Judicial en 150 mil pesos cuando estaba al frente de esa institución.

Con relación a las inculpaciones que familiares del detenido han difundido recientemente en publicaciones y ruedas de prensa -refiere el comunicado-, Arturo Olivares Mendiola manifestó, en primer lugar, “su respeto absoluto al derecho que tienen todos los ciudadanos de expresarse sobre cualquier tema en los medios de comunicación u otra vía, no obstante, afirmó que las acusaciones carecen totalmente de fundamento y están fuera de tiempo, ya que se mencionan hechos que teóricamente ocurrieron en marzo del año pasado o incluso antes, y ahora este caso está en manos de la autoridad competente y será la que determine si hay responsabilidad o no del presunto”.
 
El actual funcionario municipal negó supuestos tratos como los que los familiares apuntan de una compraventa de plaza laboral cuando él era director general de la Policía Judicial del Estado y sobre la supuesta tortura contra Héctor Cacique cuando fue detenido por su presunta participación en el delito por el cual hoy se le juzga.  
 
“En todos los cargos que he ocupado me he conducido con total apego a la ley y no de ahora, mi carrera como militar así me lo exigía, así me comporté siempre y hasta ahorita”, subrayó.   
 
Reconoció la difícil situación por la que atraviesa la familia, que se siente agraviada al ver a un integrante ante una circunstancia muy difícil y es entendible que traten de utilizar cualquier argumento en el intento por desvirtuar el proceso; “pero, como dije antes, reitero que este caso está en manos de un juzgado y será quien decida lo conducente”.
 
Finalmente, expresó toda su disposición para responder a las instancias oficiales que lo soliciten, y todos los procedimientos que tuvo bajo su cargo en la Procuraduría General de Justicia del Estado constan en los expedientes respectivos.

Cabe mencionar que Héctor Cacique fue detenido el 17 de marzo del 2013 con relación a la ejecución de siete personas en el bar ‘La Sirenita’, ocurrida unos días antes, y cuando fue presentado por la Policía Judicial, mostraba visibles golpes en el rostro que el día anterior, de acuerdo a fotografías de la propia Policía Turística, no tenía. (Con información de Seguridad Pública)

Comentarios en Facebook