CHETUMAL, MX.- Un hombre de 28 años se llevó a la tumba el secreto del por qué decidió privarse la vida mediante la vía del ahorcamiento dentro de su vivienda, en el poblado de Pucté. El hallazgo lo realizó su hermano menor, quien lo descolgó, pero ya no contaba con signos vitales; desconoce por qué su consanguíneo tomó esa fatal decisión. Es el suicidio número 18 en el municipio de Othón P. Blanco.
Policías ministeriales establecidos en la población de Pucté, ribera del río Hondo, acudieron esta mañana a una vivienda de esa localidad al tener conocimiento del reporte de un occiso por la vía del ahorcamiento.
Cuando los policías judiciales llegaron al lugar indicado por operadoras del número de emergencias 066, se entrevistaron con quien se identificó con el nombre de José Javier, de 24 años.
Informó que llegó al predio donde vive y de igual manera tiene su casa su hermano mayor de nombre Antonio de Jesús, de 28 años, y se le hizo extraño que las llaves de su vivienda estuvieran pegadas a la cerradura de la puerta.
Por ello decidió observar por la ventana y se dio cuenta que su hermano estaba suspendido de una soga que ató a su cuello y afianzó a la viga del techo de su humilde casa; de inmediato ingresó y lo descolgó, pero su hermano ya no tenía signos vitales, por ello reportó el deceso al número de emergencias.
Policías ministeriales acordonaron el área en espera de la llegada de un agente ministerial y peritos, quienes arribaron posteriormente y al concluir con sus diligencias ordenaron el traslado del cuerpo del occiso al anfiteatro del Servicio Médico Forense de Chetumal para realizarle la necropsia de rigor.
El suicida, quien se dedicaba a la limpieza en la gasolinera del poblado Pucté, no dejó carta póstuma. Era casado y desconocen qué lo motivó a privarse de la vida de esta manera; se convirtió en el suicidio número 18 en lo que va del año en el municipio de Othón P. Blanco. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
