REVUELTA EN TELESECUNDARIA: Padres amarran al conserje y encierran a maestros por desvíos de dinero y anomalías en escuela de Valladolid Nuevo

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CANCÚN, MX.- Padres de familia de la telesecundaria María Avila Quintal del poblado de Valladolid Nuevo tomaron las instalaciones del plantel educativo, amarraron al conserje en la puerta principal y encerraron a cinco profesores en un salón, en protesta por el robo de 90 mil pesos del programa Escuelas de tiempo completo, perpetrado presuntamente por el director de la telesecundaria Joel Raudel Dzulub.

Fue a las 8 de la mañana cuando los padres de familia ingresaron a la escuela. Sin titubeos, reclamaron airadamente la ausencia del director, quien desde hace una semana fue denunciado por el desvío de recursos, sin que la Secretaría de Educación y Cultura, SEyC, tomará realmente cartas en el asunto.

Al interior del plantel, los padres retiraron a los alumnos mientras que, enardecidos por la prepotencia del conserje de la telescundaria -a quien señalaron como uno de los cómplices del director-, lo amarraron en la puerta principal y exigieron la presencia de las autoridades educativas.

En tanto, en el salón principal de la escuela, cinco profesores fueron encerrados por más de dos horas.

El coraje de los padres de familia

Hace una semana, los padres de familia de la telesecundaria María Avila Quintal denunciaron los abusos y excesos del director del plantel, Joel Raudel Dzulub. Los señalamientos eran muchos.

Por ejemplo, en varias ocasiones el director cometió actos como: cerrar las puertas de los baños a los alumnos del plantel, quienes tenían que orinar y defecar, textualmente, en el monte.

De igual forma regañaba a mansalva y sin motivo aparente a los alumnos que se cruzaban en su camino. También agarraba represalias con los hijos de los padres que le reclamaban estos actos.

Sin embargo, hubo un hecho que desató el coraje y la ira de los padres de familia. Hace una semana, la mesa directiva de la secundaria se enteró de que la escuela recibió 90 mil pesos para mejoras del plantel mediante el programa Escuelas de tiempo completo.

El dinero, en teoría, debía utilizarse para compra de computadoras, de televisores y de mejoras para el comedor y aulas, entre otros aspectos.

“La telesecundaria se supone que debe tener televisores y ninguno sirve, la antena que nos pusieron tampoco sirve, el comedor es un desastre en verdad y se suponía que el dinero que había llegado debía ser utilizado para mejorar estos aspectos, sin embargo, eso no ocurrió, el profesor Joel se llevó el dinero y compró puras tonterías”, explicó doña Norma, madre de familia que decidió actuar en consecuencia de estos actos.

Y es que la gota que derramó el vaso fue el hecho de que el director de la telesecundaria entregó recibos de compra de insumos como detergente, cloro, escobas, entre otros, a los padres de familia para justificar el uso de los 90 mil pesos del programa Escuelas de tiempo completo.

Indignados, los padres de familia decidieron que terminarían con eso y denunciarían al director ante la secretaría. Lo hicieron y también lo exhibieron en los diarios POR ESTO! a través de una Voz del Pueblo. Se suponía que la SEyC debía actuar en consecuencia, pero no lo hizo.

Ante esto los padres llegaron este lunes a la conclusión de presionar a las autoridades educativas. Amarraron al conserje William N., a la puerta, pues se puso agresivo con los padres al momento de ocurrir los hechos.

En tanto, los profesores Dante Mucul, Rolando Tuz, Jorge Enrique Burgos, Ana Iveth Celis Molina y la secretaria del director, Margely Dolores, fueron encerrados en el aula 1 A, bajo llave.

“Nosotros sabemos que los profesores no tienen nada que ver, sin embargo, ahí se quedan encerrados hasta que nos atiendan. Ya basta de abusos, engaños y mentiras de la secretaría”, adujeron enojados los padres de familia y tomaron la telesecundaria.

Pésimo manejo de crisis de la SEyC y de Jorge Coral

Tuvieron que pasar más de dos horas para que la Secretaría de Educación y Cultura actuara en consecuencia a raíz de la toma de la escuela por parte de los padres de familia de Valladolid Nuevo.
Cerca de las 11 de la mañana llegó hasta la telesecundaria el director de educación básica de la zona norte, Jorge Coral Coral, acompañado por el jurídico de la secretaría, Gonzalo Medina, además de un visitador de los Derechos Humanos.

Entraron al plantel con aires de grandeza. Soberbios. Caminaron hasta el salón donde se encontraban los profesores y el conserje, quien sólo duró amarrado pocos minutos en la puerta principal.
Luego comenzaron a hablar entre ellos. Mandaban mensajes de sus celulares, observaban a los padres de familia. Nunca se presentaron como funcionarios de la dependencia, a pesar de que ellos son los que deben pregonar la “educación”.

Pasaron 20 minutos mientras midieron terreno. Para ese momento a Jorge Coral le incomodó la presencia de la prensa y ordenó a Gonzalo Medina que le dijera a los padres que se hablaría en un aula, no en el patio donde se concentraba la gente.

Mientras los profesores encerrados esperaban ansiosamente, muchos de ellos tenían ganas de ir al baño pero a Jorge Coral le importaba evitar dar explicaciones ante los medios de comunicación.

Para su mala fortuna, su petición fue rechazada. “Nosotros ya estuvimos en el sol ahora que se aguanten estas personas, aquí en el patio hablamos y no nos movemos. No vamos a ir al salón”, fue la respuesta que recibió.

Malhumorado, sin sacarse los lentes, estilo policía judicial, el director de educación básica en zona norte sólo atinó a decir, “Bueno, júntense aquí y ahora el licenciado (Gonzalo Medina) les va explicar la situación”. En ese momento Gonzalo Medina ya se había quitado sus lentes de sol y miraba de frente a los padres de familia.

Lo que siguió después fue una demagogia de Jorge Coral y los supervisores. Más de una hora hablaron sin obtener respuesta. Incluso un padre de familia increpó directamente al funcionario.

“Usted nada más nos quiere verbear, con eso, y no es así, exigimos solución”, le dijo de frente y tajante ante la mirada de enojo de un funcionario que ha sido señalado muchas veces por prepotente.

Al final, después de explicaciones y palabrería fueron los padres de familia que decidieron liberar a los maestros, quienes pidieron ir al baño, mientras Jorge Coral, su supervisor y el jurídico, se aislaban en una esquina del plantel para intercambiar ideas. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)

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