Y es que al insufrible alcalde de Cancún, lo agarraron en la maroma.
Por ahí se filtró que se reunió con ¡Carlos Joaquín González!, el enemigo publico número uno del “Primer Priista de Quintana Roo”.
Y de entrada, no le permitieron que se acercara al Tianguis de Acapulco, a donde sí invitaron a otros colega suyos, como Mauricio Góngora, de Playa del Carmen; Fredy Marrufo, de Cozumel y David Balam, de Tulum.
Paul se tuvo que quedar en Cancún, en donde otra vez optó por refuguiarse en sus oficinas alternas.
Pero, la verdad, es que si Carlos Joaquín ve a Paul Carillo como un refuerzo, entonces es que ya lo infiltraron.