Justo cuando el Poder Judicial requería de un “golpe de mano” para darle credibilidad, el Congreso del estado, dominado por el PRI y PVEM, reeligieron por otros seis años a Fidel Gabriel Villanueva Rivero, como presidente del Tribunal Superior de Justicia.
Y si ya de por sí Fidel Gabriel estaba más que cuestionado, su reelección quedó aún más empañada por el llamado de atención de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, que le ordenó hacer bien su tarea, pues no fundamentó su negativa a las recomendaciones en el caso de Pedro Canché.
Entre las recomendaciones, por cierto, está proceder contra el director del Instituto de la Defensoría Pública, Lino Magos, quien es totalmente indefendible y a quien desde hace mucho Fidel Gabriel, le debió dar las gracias.
Y por si fuera poco, sigue en el Poder Judicial como consejero ‘ciudadano’ del Consejo de la Judicatura, Gastón Alegre López, cuya ética y probidad están fuera de discusión pues está más que comprobado que carece de ambas.
Al Poder Judicial de QR le urge una limpia y no precisamente en Catemaco.