PARCELAS BAJO EL AGUA: Escurrimientos cortan caminos y empiezan a causar estragos en zonas bajas de Bacalar

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HUATUSCO, BACALAR, MX.- Los efectos de los escurrimientos provenientes de Campeche se han empezado a notar en la zona rural del municipio de Bacalar, donde en una ruta que enlaza a 11 comunidades hay parcelas y potreros cubiertos por completo de agua, y en algunas partes del camino ya se han empezado a formar espejos de agua, además de que hay puentes que han alcanzado el 70% de su capacidad de desfogue.

Las corrientes afectan a las comunidades de Reforma, Andrés Quintana Roo, Blanca Flor, Nuevo Jerusalén, Buena Fe, San Fernando, Buena Esperanza, El Paraíso, Altos de Sevilla, Río Escondido y Huatusco, con agua producto de los escurrimientos de las lluvias caídas en el estado de Campeche, y que llegan hasta esta región debido a que el territorio campechano tiene cerros y, por tanto, son tierras más altas que las quintanarroenses.

Por encontrarse en zona baja, estas comunidades del sur de Quintana Roo, recorridas por el equipo de POR ESTO!, son vulnerables a inundaciones o cortes carreteros por la acumulación y el cruce constante de las caudalosas corrientes en su cauce hacia la laguna de Bacalar, a donde van a parar.

La afectación mayor se observa hasta el momento el camino que une a Reforma con la pequeña localidad de Andrés Quintana Roo, donde una fuerte corriente de agua cruzó el camino e impide el paso de vehículos pequeños, como se expone en una nota aparte en esta edición.

El camino de Río Escondido a Huatusco es otro de los tramos más afectados por estos escurrimientos, ya que una gran cantidad de agua se ha acumulado a los costados del camino, abarcando varios kilómetros de áreas verdes y alcanzando niveles de hasta 3 metros de altura.

Estos acumulamientos de agua ya han bloqueado totalmente varios caminos que los campesinos utilizan para acceder a sus milpas y potreros, y una de sus mayores preocupaciones es que el agua siga subiendo hasta llegar al nivel de los caminos que utilizan para salir de sus localidades.

En el tramo de Reforma a Blanca Flor se aprecian campos y potreros inundados, donde el agua se extiende varios kilómetros al horizonte y su nivel alcanza hasta los 3 metros sobre el suelo, llegando a cubrir una tercera parte de los postes de luz.

Toda el agua acumulada ha formado verdaderas lagunas que han cubierto grandes extensiones de parcelas, incluso en algunas partes llegando al ras de los caminos.

De Blanca Flor a Buena Fe se observó más que nada el mal estado del camino a causa de las lluvias, así como ligeros escurrimientos que corren a los lados de la maltrecha vía.

En la ruta de Buena Fe a Nuevo Jerusalén ya se ha formado un pequeño cruce de agua que pasa sobre el camino, con el riesgo de que se extienda conforme avancen los escurrimientos.

El tramo de Buena Fe a San Fernando igual presenta severos deterioros a causa de las fuertes lluvias, pues existen baches de gran tamaño que abarcaban casi todo el camino; además, se observan acumulamientos de agua a sus costados.

El canal del puente que se encuentra entre las comunidades de San Fernando y El Paraíso ha alcanzado alrededor del 30% de su capacidad, pues se aprecia que el caudal del río ya llegó a unos 2 metros de altura, con la probabilidad de hacerse más grande a medida que sigan los escurrimientos.

En los alrededores de este puente ya se ha acumulado una gran cantidad de agua en las parcelas, por lo que pobladores de la comunidad de El Paraíso consideran que en el transcurso de los próximos días el caudal del río subirá su nivel.

En la ruta de El Paraíso a Río Escondido, pasando por Altos de Sevilla, los canales de los puentes todavía están entre un 40 y 50 por ciento de su capacidad de drenaje, además de que el camino no presenta cruces ni espejos de agua o acumulamientos en sus costados.

Los puentes ubicados en el tramo de Altos de Sevilla a Reforma se encuentran a una capacidad de 40 a 70 por ciento, donde el caudal del río ya ha alcanzado una altura que va de uno a tres metros. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)

PASOS CORTADOS POR ESCURRIMIENTOS, REPORTA DIARIO

ANDRÉS QUINTANA ROO, BACALAR, MX.- Parcialmente incomunicada quedó la comunidad bacalarense de Andrés Quintana Roo, después de que la madrugada de este miércoles una corriente de agua cruzara sobre el camino, que lo fue deslavando hasta imposibilitar el paso de vehículos pequeños.

A raíz de ello, los niños de dicha comunidad no tuvieron clases este día, ya que la maestra no pudo entrar al poblado debido a que su única ruta de acceso está bloqueada por un gran espejo de agua de unos 40 metros de largo y hasta 40 centímetros de altura.

En el transcurso de la noche del martes y madrugada de este miércoles, los escurrimientos provenientes de Campeche se han ido acumulando de manera severa en el área del poblado Andrés Quintana Roo, al grado de formar verdaderas lagunas que han cubierto grandes extensiones de áreas verdes.

Toda esta acumulación de agua necesita seguir su curso a zonas bajas para finalmente encontrar su desembocadura, y esto es precisamente lo que ocasionó que se formara un gran cruce de agua sobre el camino que conecta a la comunidad de Andrés Quintana Roo con el exterior.

La fuerza de la corriente fue deslavando este camino hasta volverlo intransitable para vehículos pequeños, y ahora sólo puede ser utilizado por unidades grandes como camionetas y camiones.
Aun en el caso de las camionetas representa un paso difícil y riesgoso, ya que pueden quedar atascadas o salirse del camino, por lo que se recomienda no hacerlo y esperar las indicaciones de la autoridad.

Los campesinos que necesitan salir del poblado o entrar, lo hacen con suma precaución y a pie, pues la mayoría se traslada en bicicleta o motocicleta, vehículos que de ninguna manera pueden atravesar dicho camino en esas condiciones.

De extenderse este cruce de agua el problema se agravaría, al grado de dejar el camino inaccesible para las camionetas y camiones, pues conforme el agua va siguiendo su curso, la superficie de este acceso continúa destruyéndose.

Con ello, ya se empiezan a registrar los primeros estragos causados por los escurrimientos provenientes de Campeche, los cuales se acumulan en zonas bajas del sur de Quintana Roo, que abarcan más de 10 comunidades de los municipios de Othón P. Blanco y Bacalar. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)

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