La edición de este año de Miss Universo parece ir de la mano de la polémica. Después de una gala en la que la confusión final del presentador con el nombre de la ganadora ha provocado miles de comentarios y críticas en las redes sociales, hoy la protagonista es la vida sentimental de la reciente coronada, Miss Filipinas.
Fue la propia modelo la que, en un programa de televisión al que acudió en mayo, dejó entrever que la información acerca de su relación con el presidente era cierta.
“Hablamos con frecuencia, es un hombre muy divertido y gracioso”, declaró en la entrevista cuando se le preguntó por unas fotografías en las que ambos aparecían cenando en un lujoso hotel de Manila.
Sin embargo, no quiso dar más detalles, y cuando indagaron sobre el nivel de intimidad que mantenían, se limitó a decir que “él está muy ocupado con el país y yo con Miss Universo”.
Elegido para el cargo en 2010, a Aquino muchos lo tildan como el “soltero de oro” de Filipinas, y en ocasiones sus relaciones amorosas copan más páginas de la prensa nacional que sus decisiones políticas.Desde que pusiera fin a su relación con la política Shalani Soledad después de dos años, a Aquino se le han conocido romances con su estilista, Liz Uy, o con la presentadora de televisión Grace Lee.
Cuando el SCMP le preguntó por su relación con Pia, él se limitó a contestar: “secreto”.
Con 55 años, parece ser que al dirigente no le corre mucha prisa el casarse. “Antes tenía más esperanzas de encontrar una esposa. Ahora ya no tengo tantas ganas”, declaró al diario.La controvertida relación se suma a la ya conocida confusión de ganadoras de este concurso de belleza. Al final de la gala, el presentador Steve Harvey nombró como mujer más guapa del mundo a Ariadna Gutiérrez, Miss Colombia.
Sin embargo, cinco minutos después se dio cuenta de que se había equivocado al leer la tarjeta con la reina de la belleza y, tras pedirle disculpas, la anterior Miss Universo, Paulina Vega (para más señas prima de Gutiérrez), tuvo que despojar a la joven de flores, banda y corona para entregárselas a Miss Filipinas, la auténtica vencedora. (Fuente: El Mundo)
