En una asamblea caótica, taxistas acuerdan auditar a la dirigencia del Suchaa en Chetumal

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CHETUMAL, mx.- El Sindicato Único de Choferes de Automóviles de Alquiler (Suchaa) irá tras los dirigentes que saquearon a la organización, luego de aprobar en asamblea la conformación de una comisión que realizará un arqueo a fondo de las últimas administraciones.

En una atropellada y hasta violenta reunión celebrada en el local para fiestas propiedad de la organización, ubicado en avenida Hidalgo y Primo de Verdad, segundo piso, José Rafael Cetina Galván, secretario general del gremio taxista, encabezó la asamblea ordinaria a la que asistieron alrededor de mil 100 personas, poco menos de la mitad del padrón de socios, pero que, conforme a los estatutos resulta legal y válida, tratándose de segunda convocatoria.

Al filo de las ocho de la mañana la cortina de acceso al local fue abierta únicamente en su puerta individual para permitir el acceso a socios con credencial. Para las nueve de la mañana, la reunió daba inicio con una importante mayoría de socios de edad avanzada y un puñado de alebrestadores que fueron identificados como gente del exdirigente gremial Rubén Pelayo Kúc.

Este grupito fue aplacado por el resto de la concurrencia, bajo amenaza de echarlos por la fuerza si continuaban interrumpiendo los asuntos del orden del día con gritos desaforados y sin razón.

Roces en el ingreso

Abajo, Rubén Pelayo Kúc ya había llegado con otro grupo de simpatizantes que intentaron subir al salón de reunión, pero fueron impedidos por la gente que vigilaba el acceso. Para ese momento ya habían sido alertadas las fuerzas del orden público, y ocho patrullas con 50 elementos estatales acordonaron la manzana.

Los vigilantes del acceso al recinto taxista tuvieron que bajar la cortina del inmueble ante las amenazas de los pelayistas que, encabezados por el propio Pelayo Kúc, arremetieron contra la cortina de metal y la rompieron para enfrentar a los encargados del filtro de entrada. La policía se mantuvo al margen.

El exlíder taxista no pudo ingresar y se llevó un uppercut que le bajó el ánimo pendenciero, pero unos cuantos de su gavilla sí lograron colarse. Pelayo se retiró del lugar.

Arriba en la asamblea, las cosas se llevaron con razonable tranquilidad, abordando punto por punto el orden establecido para el caso, incluidos el informe del tesorero y del secretario general.

Integran comisión de auditoría

Sin embargo, la parte que más interesó a los presentes fue la conformación de una comisión, integrada por socios concesionarios nombrados en el mismo acto, que se encargarán del arqueo correspondiente a las administraciones del sindicato, bajo sospecha de haber cometido saqueos y desfalcos a los bienes de la organización.

La denominada Comisión de Auditoría y Fiscalización de Recursos Económicos quedó integrada por Héctor Ballote López, presidente; Alan Félix Trejo Alemán, secretario; Alejandro Pacheco Pastrana y Concepción Rivera, como vocales, todos aprobados por unanimidad en la asamblea.

Se arma trifulca

Entre tanto, el grupo de choque auspiciado por Rubén Pelayo Kúc recobró el aliento y, tras un nuevo intento por colarse a la reunión, terminó abalanzándose sobre los vigilantes del acceso, que los recibieron con gas pimienta.

Luego los proyectiles, rocas, envases llenos de refresco, sillas que algunos dejaron caer por las escaleras, patadas, trompones, empellones, amenazas y mentadas menudearon, ante una corporación policíaca impávida. Incluso, varios uniformados esperaban ser atendido en el carrito de empanadas de “Chabelo”, mientras otros tantos comían tortas sentados en la parte posterior de las patrullas tipo pick-up.

Los ánimos se aplacaron momentáneamente hasta que un solitario y descamisado personaje volvió a patear la cortina metálica, que ya había sido reforzada con una barricada de mesas banqueteras y entonces algunos uniformados se plantaron en el acceso para poner orden y que el resto de supuestos taxistas pudieran entrar a la asamblea. Ya eran casi las 10 de la mañana.

Se escucharon aplausos en las alturas, pero en el acceso se volvió a armar la gresca, en la que esta vez se vieron involucrados los policías. Hubo golpes, proyectiles y, finalmente dos detenidos que fueron esposados con un solo juego de esposas y subidos a la patrulla 1458.

Terminó la asamblea y con ello se disolvieron los manifestantes y los curiosos, mientras que la policía estatal se concentró calles abajo, sobre la misma avenida Hidalgo, nada más por cualquier altercado.

Sobre el resultado de la asamblea, José Rafael Cetina Galván comentó a Novedades Chetumal que solicitarán el apoyo del Colegio de Contadores para llevar a cabo el arqueo y que buscan que todo aquel que le deba al sindicato, pague su deuda.

“Rubén Antonio Pelayo Kúc tiene cuentas pendientes con el sindicato y Eliézer Argüelles Borges…”

Por lo pronto, Cetina Galván, que cubre un interinato, logró el aval de la asamblea para continuar al frente del Suchaa hasta el 2018. (Fuente: SIPSE)

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