Un fuerte terremoto, de magnitud 6,2 ha devastado el centro de Italia, concretamente las regiones del Lazio, Marcas y Umbría. Los muertos ascienden ya a 159, según ha confirmado el jefe de la Protección Civil italiana, Fabrizio Curcio, actualizando con la recuperación de otros cuatro fallecidos.
Algunas horas antes, el primer ministro italiano, Matteo Renzi, informaba de la muerte «al menos 159 los muertos» y de 368 las personas heridas tras el terremoto. «Italia es hoy una familia golpeada, pero que no se detiene», dijo Renzi, durante una comparecencia desde Rieti donde acudió para seguir la emergencia. Tal y como informa el diario italiano «Corriere della Sera», entre las víctimas podría haber un número elevado de niños.
El epicentro del seísmo se ha situado en Accumoli, pueblo en la provincia de Rieti, región del Lazio, con 635 habitantes. Muchas personas, informan las autoridades, se encuentran en estos momentos bajo los escombros.
Además de las vidas humanas, Italia lamenta hoy la destrucción de su increíble patrimonio. Norcia y Amatrice, devastados por el seísmo e incluidos en la lista de «I borghi più belli d’Italia» (los pueblos más bellos de Italia), se encuentran hoy en ruinas. «Los pueblos ya no existen», dicen los alcaldes de ambas localidades. «La situación es crítica», afirma Protección Civil del Lazio. Los pueblos afectados están disponiendo centros de acogida para las numerosas personas que se han quedado sin casa.
En Amatrice, el hotel restaurante «Roma», famoso por la pasta a la «amatriciana», está arrasado y podrían estar atrapadas todavía unas 70 personas, según ha explicado el alcalde. «El hotel tiene 40 habitaciones pero solo hemos rescatado a dos personas. Aún no hemos podido establecer cuántos dormían».
La primera sacudida, de madrugada
La primera sacudida se ha producido a las tres y media de la madrugada, y luego le han seguido 39 seísmos más y más de un centenar de réplicas. El terremoto también ha sido advertido en Bolonia, Roma y Nápoles, donde no se han registrado daños. La violenta sacudida ha causado el pánico en el centro de Italia y particularmente entre los habitantes de L’Aquila: el recuerdo del terremoto de hace siete años, con 309 víctimas, está aún muy vivo en la población. La entrada de acceso a algunos de los pueblos afectados se ve obstruida en ciertos puntos por la acumulación de escombros, que dificultan el paso de vehículos. Muchísimas han sido las llamadas a Protección Civil y a los bomberos desde todo el centro de Italia.
«La mitad del pueblo ya no existe»
En busca de supervivientes se excava a mano en Amatrice y Accumol. La situación más grave está precisamente en Amatrice, donde la calle principal se ha derrumbado prácticamente y las vías de acceso al pueblo son inaccesibles. Dramáticas las palabras del alcalde, Sergio Pirozzi: «Es una tragedia, hay muertos, la mitad del pueblo ya no existe. Tratamos por todos los medios de llevar los primeros auxilios, pero trabajamos con muchas dificultades. Hemos mandado a todos a las instalaciones deportivas», explicó Pirozzi. Precisamente en Amatrice se pudo rescatar a un niño en graves condiciones y y las autoridades buscan a su hermano en estos momentos. Con ellos habría otras cuatro personas. «Han oído los gritos del niño y de su madre», testimonian algunos de los vecinos. Se intenta rescatar también a dos jóvenes afganas de 26 y 27 años, que formarían parte de un grupo de refugiados en el pueblo, con un proyecto de asistencia.
Una abuela mete a sus nietos bajo la cama
En medio del drama general, de Pescara del Tronto ha llegado una buena noticia: dos niños de 4 y 7 años han sido rescatados con vida. Los había metido bajo la cama la abuela, también viva, aunque atrapada durante horas bajo los escombros.
De drama habla igualmente el alcalde de Accumoli, un pueblo subdividido en pequeñas fracciones, donde al menos hay seis víctimas, entre ellas dos niños. «Es un desastre, el país está medio hundido y no logramos saber cuántas son las víctimas», ha afirmado el alcalde, quien desesperado ha asegurado: «Los auxilios han llegado demasiado tarde; el primer grupo de bomberos ha llegado a las 07:40». En Rieti se ha hecho un llamamiento a la población para que acuda a donar sangre al hospital San Camilo de Lellis.
Además de las dificultades en las carreteras de acceso a algunos de los pueblos afectados por el terremoto, han sido también interrumpidas algunas líneas de ferrocarriles regionales. Paulatinamente, se están reactivando para reanudar el servicio.
L’Aquila, el seísmo anterior
El presidente de la República, Sergio Mattarella, que se encontraba en Palermo, ha regresado con urgencia a Roma, y se mantiene en contacto con Protección Civil. El primer ministro italiano, Matteo Renzi, que ha anulado su viaje a Francia donde debía participar este jueves en la reunión de los socialistas europeos junto al presidente francés, François Hollande, ha asegurado que el Gobierno italiano no dejará «a nadie sólo» tras el terremoto que ha golpeado el centro de Italia.
«No dejaremos a nadie solo, ninguna familia, ningún ayuntamiento, ninguna pedanía», ha asegurado en una breve conferencia de prensa en Palacio Chiggi. Renzi, que ha anunciado que esta tarde se trasladará a las zonas afectadas, ha agradecido a Protección Civil y a los voluntarios que están llevado a cabo las labores de rescate para tratar de sacar con vida a las personas que están bajo los escombros.
Los expertos comparan este terremoto con el de L’Aquila, el último relevante producido en Italia, en el 2009. «Este es un terremoto de magnitud importante. El escenario es diverso al Aquila, porque allí, como capital de Región, había una gran concentración de gente. Aquí la población está mas extendida en diversos lugares. Por eso imaginamos que el impacto será menos grave en víctimas. Pero es un terremoto de gravedad», ha afirmado el responsable del comité operativo de Protección Civil. (Fuente: ABC.ES)
