EL ‘AJUSTE DE CUENTAS’ EN EL CONGRESO… TRAS BAMBALINAS: La operación joaquinista para acorralar a Borge, primera respuesta a 5 años de excesos y autoritarismo

CANCÚN, MX.- La respuesta a cinco años de excesos y autoritarismo de Roberto Borge no podía ser de otra manera.

El ‘joaquinismo’ dio un primer paso contra las atrocidades del ‘betismo’ al dejar fuera al PRI y PVEM de la Gran Comisión de la XV Legislatura y de las comisiones más relevantes del Congreso del estado.

El PAN y PRD, cuyos logotipos acompañaron el nombre de Carlos Joaquín en la boleta electoral -con el respaldo de Morena, el Partido Encuentro Social (PES) y el Panal-, no tuvieron piedad del PRI y del PVEM, que siguen hasta ahora bajo la tutela de Roberto Borge y Félix González, que juntos representan 11 años de continuismo, saqueo y tiranía.

‘Opositores’ le dieron una sopa de su propio chocolate al PRI. Las anteriores legislatura dominadas por el Revolucionario Institucional no le dieron ninguna oportunidad a panistas y perredistas de formar parte de la Gran Comisión y de comisiones relevantes como la de Justicia o Hacienda, Presupuesto y Cuenta.

Quizá habrá quien cuestione las formas empleadas por azules y amarillos el sábado y este lunes y los culpen de repetir los añejos excesos del PRI.

Pero queda claro que en estos momentos los republicanismos y la división de poderes no están aún la ‘agenda ciudadana’.

En realidad, más que votar por Carlos Joaquin o PAN-PRD, la mayor parte de los electores de Quintana Roo votaron en contra del PRI y sus símbolos Félix González y Roberto Borge.

Se podría decir, en ese mandato de los ciudadanos, que ‘Beto’ Borge pague.

Y el primer ajuste de cuentas ha sido contra un ‘felixista’-borgista.

A Raymundo King le ha tocado pagar su disciplina lacayuna hacia ‘Beto’ Borge.

Si bien el PRI había perdido la gubernatura, el PRI, con sus aliados ‘verdes’, daba por hecho que  conservaría la mayoría del Congreso y, en consecuencia, se apoderarían del control del Poder Legislativo.

Raymundo King ya se veía como Presidente de la Gran Comisión.

Las cuentas alegres sumaban 13 votos: siete votos del PRI, cinco del PVEM y uno del Panal.

Y en contraste, a la alianza ‘joaquinista’ PAN-PRD no les alcanzaría, pues en las cuentas alegres de Beto Borge, Morena se abstendría.

Si acaso, panistas y perredistas tendría el voto de Carlos Mario Villanueva, del PES, de quien se podría esperar todo.

Seis votos del PAN y tres del PRD y acaso uno del PES, serían insuficientes para la causa ‘joaquinista’.

Pero el ‘joquinismo’ tejió fino y para que la cuña apriete mandó a negociar al ex priista Miguel Ramón Martín Azueta.

Panal, el peor negocio de “Beto” Borge

Previo a las elecciones, el Panal ya estaba apalabrado con Carlos Joaquín. En Puebla, con Tony Gali, los ‘turquesa’ se habían ido con el PAN.

Sin embargo, de última hora, ‘Beto’ Borge se echó a la bolsa al Panal. A cambio del apoyo a Mauricio Góngora, les dio dos presidencias municipales: Lázaro Cárdenas y Bacalar.

El peor negocio de ‘Beto’ Borge, el Panal ni siquiera alcanzó el tres por ciento de los votos.

‘Operadores’ de Carlos Joaquin negociaron con líderes nacionales del SNTE y del Panal, el apoyo del diputado del distrito 13, Javier Padilla, en favor de la alianza ‘joaquinista’ del Congreso del estado.

El propio Carlos Joaquín cerró el trato con Juan Díaz, el líder nacional del SNTE.

PES, MVM manda

Los planes eran que el PES se sumara a la alianza encabezada por el PRI, pero por tratarse de sus primer proceso electoral, tuvo que contender solo.

Previo al proceso electoral, Roberto Borge sumó las voluntades de Carlos Mario Villanueva Tenorio y le mando como ‘refuerzo’ a Gregorio ‘Greg’ Sánchez.

Borge supuso que ‘Greg’ le ayudaría a quedarse con el voto opositor en el norte del estado y con Carlos Mario sumaría al ‘villanuevismo’.

Pero, en pleno proceso electoral, el ex gobernador Mario Villanueva activó una campaña epistolar en favor de Carlos Joaquín.

En tanto, ‘Greg’ promovió el voto cruzado, para su causa, y para el candidato a gobernador de la alianza PAN-PRD

En los hechos, el PES hizo una coalición de facto con Carlos Joaquín y le dio unos 25 mil votos.

En la definición de la Gran Comisión, esta alianza siguió y Carlos Mario se sumó a la alianza legislativa del PAN y PRD.

Morena, el “borgismo” del Dr. Pech

Otro mal negocio de Roberto Borge fue con José Luis Pech Varguez.

Al principio, parecería que Pech le sería de gran ayuda pues, de entrada, evitó que Julián Ricalde fuera el candidato de Morena.

Y luego pretendió usarlo para restarle votos a la alianza del PAN y PRD.

Pero, finalmente, muchos cayeron en cuenta que Pech jugaba para Borge y no por un ‘proyecto alternativo’ de nación.

En tanto, los diputados de Morena, Silvia Vázquez Pech y Juan Ortiz Vallejo, llegaron por el principio de representación proporcional y fueron candidatos vía ‘La tómbola’.

Ambos procedían de las filas del PRD, con vínculos con Emiliano Ramos, Rafael Quintanar y Lourdes Cardona Musa.

Pech no tenía ninguna ascendencia con Silvia Vázquez y Juan Ortiz y además que su candidatura a gobernador dividió a Morena ante los señalamientos de su vinculación con Roberto Borge.

La operación de convencimiento para sumar a estos diputados a la alianza PAN-PRD fue relativamente sencilla.

El PVEM, se quiebra

El enlace de Carlos Joaquín con el Poder Legislativo, Miguel Ramón Martín Azueta, también tuvo pláticas con José de la Peña.

El coordinador de los diputados ‘verdes’ había aceptado sumarse a una acuerdo por la Gran Comisión.

Finalmente rompió los acuerdos y se echó para atrás.

Fracaso de Félix

En casa de Gobierno y en el hotel Courtyard Cancun Airport, Roberto Borge operó directamente la búsqueda de la Gran Comisión para el PRI.

Por su parte, Raymundo King motivó diversas reuniones con representantes de Carlos Joaquín, del PAN y PRD.

Y al final, entró a la quiete el ‘estelar’ Félix González Canto.

Todos fracasaron y ‘Beto’ Borge se quedó en la indefensión. (Noticaribe)