Al Congreso del estado le cayó una ‘papa caliente’ con la iniciativa del Ayuntamiento de Benito Juárez de privatizar el alumbrado público en favor de la empresa Celsol S.A. de C.V, de Monterrey.
Cuando precisamente el cabildo cancunense –dominado por PVEM y PRI- daba sí a esta nueva privatización de un servicio público municipal, la diputada panista Mayuli Martínez manifestaba a los reporteros que habría que tomar el parecer de la comunidad.
De alguna u otra manera ya empezó una especie de consulta, pues en redes sociales hay opiniones sobre esta iniciativa y la mayoría son de un rotundo no a esta idea de los verdes y priistas.
Como dirían los clásicos, la “burra no era arisca…”, pero los cancunenses han padecido la privatización de servicios públicos como el transporte urbano de pasajeros, la recolección y confinamiento de la basura (y dos veces) y el agua potable.
La nueva mayoría del Congreso del estado está ante una dura prueba, pues si bien no hay antecedentes de acuerdos legislativos entre PRI-PVEM con PAN y PRD, la iniciativa de privatizar el alumbrado público es simplemente antipopular.
Y es que una cosa son las negociaciones políticas y otra sustentar que ahora sí las cosas son diferentes y sí hay cambio.