CIUDAD DE MÉXICO, MX.- La proyección de usuarios del Tren Maya es de alrededor de 2.9 millones al año en la zona turística de Palenque y Calakmul, de acuerdo con el proyecto conceptual dado a conocer por el gobierno electo, publicó Excélsior.
El proyecto busca explotar el mercado de casi 7 millones de turistas que llegan al año a la zona de Chichén Itzá, aunque se plantea que tan solo en el Tramo Selva del proyecto, en la región de Calakmul, se atiendan a 8 mil visitantes diarios.
“Al concluir la próxima administración se proyecta mejorar la capacidad de recepción de los servicios turísticos y urbanos. La meta es atender a 8 mil turistas diarios en la zona sur de la península de Yucatán, particularmente en el Tramo Selva, que va de Palenque a Calakmul”, señala el proyecto conceptual del Tren Maya dado a conocer por el próximo gobierno.
A ese ritmo, el total de usuarios al año sería de alrededor de 2.9 millones en la zona sur de la península en 2022, año en que se planea entre en operación.
El documento estima que entre Chichén itzá y Tulum acutalmente transitan alrededor de 6.8 millones de turistas, que serían el mercado potencial que tendría el Tren Maya.
En el proyecto conceptual no se establece cuál será el total de pasajeros que trasladará en todos sus tramos y sus más de mil 525 kilómetros de recorrido.
El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador ha señalado que el tren será utilizado para movilizar al turismo en la península, para atender a pasajeros locales, y para el traslado de mercancías.
El proyecto, señala el documento, busca “generar nuevas dinámicas en la zona de la reserva de la Biósfera de Calakmul que ayudará al reordenamiento de los asentamientos colindantes. Esto se logrará a través de programas federales de apoyo a los servicios básicos de infraestructura productiva y turística sostenible”.
También impulsará “el desarrollo económico sin depredar el ambiente, al contrario, procura medidas de mitigación,compensación y protección del entorno, como la creación de corredores ecológicos al margen de la Reserva de la Biósfera de Calakmul, para contener la presión del crecimiento poblacional y la actividad humana”.
Pese a las críticas sobre posibles afectaciones al medio ambiente que pudiera generar el proyecto, el documento plantea que servirá para reordenar urbanísticamente el sur y sureste.
“Proteger el medio ambiente de los estragos que produce la invasión humana y las actividades derivadas de la precariedad económica, como la tala ilegal o el tráfico de especies.
“En el caso de las invasiones de derecho de vía, se buscará un acuerdo benéfico con los grupos sociales que, por necesidad, se hayan visto obligados a asentarse irregularmente”, recalca el proyecto dado a conocer por el gobierno electo.
En los tramos en que el derecho de vía está por obtenerse se buscará asociar a los propietarios de tierras con el proyecto “para que reciban ingresos por su patrimonio”. (Fuente: Excélsior)