CIUDAD DE MÉXICO, MX.- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) acreditó actos de violencia física, psicológica o por negligencia u omisión contra 20 estudiantes menores de edad ocurrido en diez escuelas de educación básica, tanto públicas como privadas, de Hidalgo, Tabasco y la Ciudad de México, publicó Proceso.
En un comunicado, el organismo informó que la recomendación 86/2018 fue dirigida al secretario de Educación Pública, al presidente de la Junta de gobierno del Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe), al secretario de la Función Pública y al gobernador de Tabasco.
La CNDH informó que, tras investigar nueve expedientes de queja respectivos, acreditó violencia escolar ejercida por docentes o autoridades escolares en contra de niñas, niños y adolescentes, y en otros se observó violencia entre los mismos alumnos que aumentó ante la inadecuada supervisión de los docentes.
Los hechos ocurrieron en distintas fechas y planteles: en la Ciudad de México detectó tres agresiones en preescolares privados, cuatro en escuelas primarias públicas y una en una secundaria pública.
También detectó agresiones en un preescolar comunitario del Conafe en el Estado de Hidalgo, y una más en una secundaria pública de Tabasco.
Las víctimas fueron nueve niñas, siete niños y cuatro adolescentes.
En su comunicado, la CNDH establece que, en algunos casos, los actos de violencia fueron disfrazados como “juegos”, “bromas” o “cariños”, lo que impidió que algunos menores pudieran no reconocer los ataques.
Todas las agresiones ocurrieron en el interior de instalaciones educativas durante horario escolar, cuando los alumnos se encontraban sin vigilancia de las autoridades educativas.
Además, tras conocer los hechos, no se actuó con oportunidad, calidad y calidez para atender a los agredidos. “Las autoridades fueron negligentes y omisas en la investigación y atención de las personas afectadas, antes, durante y después de los hechos violentos”, dice la CNDH.
Por ello, la CNDH solicitó al titular de la SEP la reparación del daño a víctimas directas e indirectas y se inscriban en el Registro Nacional de Víctimas, que se realice un estudio y diagnóstico sobre violencia en los planteles de educación básica del Estado y particulares que sea tomado en cuenta para elaborar un programa nacional de prevención, atención y erradicación de la violencia escolar.
También que ayude a la CNDH en el trámite y seguimiento de las quejas contra funcionarios públicos que se presenten ante los órganos de vigilancia que correspondan.
Al gobernador de Tabasco le solicitó reparar el daño a una de las víctimas y a las víctimas indirectas de otro agraviado. (Fuente: Proceso)