El tenor mexicano Javier Camarena triunfó en el Teatro de la Ópera Metropolitana de Nueva York al interpretar uno de los papeles más difíciles para cualquier cantante de ópera debido a la serie de notas altas, muy difíciles de alcanzar.
Javier Camarena se ha convertido en el furor del mundo de la ópera, siendo apenas el tercer cantante en los últimos setenta años del Metropolitan Opera House en ofrecer un bis. Esta misma hazaña la repetiría meses más tarde en el Teatro Real de Madrid, al bisar el aria Ah! Mes amis quel jour de fête de La hija del regimiento de Donizetti. El tenor mexicano es el primero en bisar en dos funciones consecutivas en la historia de ambas casas de ópera. Tras su debut en Zurich, Suiza, en el 2007, Javier Camarena ha sido admirado por la belleza de sus interpretaciones en un repertorio de gran virtuosismo y dificultad, alternando con las figuras más importantes de la ópera mundial, interpretando roles principales y bajo batutas tan destacadas como las de Claudio Abbado o Zubin Mehta, por mencionar a algunas.
La crítica especializada, en casas tan importantes como la Staatsoper de Viena, Bayerische Staatsoper de Munich, Semperoper de Dresden, el Gran Teatre de Liceu en Barcelona, la Ópera de París, el Festival de Salzburgo; y en los Estados Unidos, la San Francisco Opera y la Metropolitan Opera (MET) de Nueva York, el Teatro Real de Madrid, el Wigmore Hall de Londres, entre otras, han ovacionado sus interpretaciones en un repertorio que incluye obras de Bellini, Bizet, Donizetti, Haydn, Mozart, Rossini y Verdi. Sobre sus presentaciones como el Príncipe Ramiro en La Cenerentola de Rossini, en la puesta en escena de Damiano Micheletto, en el Festival de Salzburgo, Martin Wheeler de la revista Opera News publicó: La actuación de Javier Camarena fue incandescente. Su maravillosa interpretación del aria de Ramiro en el segundo acto fue un impresionante Tour-de-force, al final del cual el público irrumpió en aplausos en una ovación de pie, con gritos, aclamaciones y golpeando el piso con los pies, ampliamente merecidos. Camarena, no hace trucos. Su agilidad vocal es fascinante, con cada nota colocada en su centro. La belleza de su voz nunca lo abandona, y el fraseo de su línea de canto es el de un verdadero músico. Su pianísimo filado en el dúo del primer acto con Cenerentola fue de una belleza que conmovió a las lágrimas. Sumado a todo lo anterior, Camarena es un actor natural; proyectó deleite, ira, proteccionismo y determinación con convicción. Su inolvidable actuación será una memoria atesorada, de una gloriosa Cenerentola, concluyó Wheeler.
Originario de Xalapa, Ver., Camarena inició sus estudios en la Facultad de Música de la Universidad Veracruzana y se graduó con honores de la Licenciatura en Música de la Universidad de Guanajuato. Ganador del Concurso Nacional de Canto Carlo Morelli en el 2004, hizo su debut en un rol estelar como Tonio en “La Hija del Regimiento”, de Donizetti, en el Palacio de Bellas Artes. En el 2005, obtuvo el primer lugar en el Concurso de Canto Juan Oncinas en Barcelona. Posteriormente en el 2006, se integró al International Opernstudio en Zurich, bajo la tutela del Mtro. Francisco Araiza.
En el 2014, acompañado del Mtro. Ángel Rodríguez al piano, presentó su debut discográfico RECITALES que incluye canciones populares italianas y mexicanas y este 2015 lanza SERENATA que incluye solo música popular mexicana con la participación del Mtro. Armando Manzanero como invitado especial, ambos discos grabados en vivo.
En DVD/Bluray cuenta ya con grabaciones de Così fan tutte (2009) de Mozart, Falstaff de Verdi (2011), Otello (2014) y Le comte Ory (2014) de Rossini compartiendo créditos con Cecilia Bartoli, todas ellas con la Staatsoper de Zurich. Adicionalmente, están también disponibles en DVD/Bluray, El rapto en el serrallo (2014) de Mozart en una mega producción sin precedentes, grabada en el Hangar 7; una segunda versión de Falstaff (2014), bajo la batuta del maestro Zubin Metha, así como la Misa Solemne in Do menor, K 139, Waisenhausmesse de Mozart y la Misa No. 6 en Mi bemol mayor, D. 950 (2012) dirigidas por el maestro Claudio Abbado, estas últimas grabadas en el marco del Festival de Salzburgo.