NUEVO LEÓN, MX.- Las autoridades de Nuevo León anunciaron el cierre del penal del Topo Chico, como parte de un plan de reestructuración de seguridad y luego de una nueva trifulca que dejó como saldo un interno muerto y 19 heridos, además de un guardia de seguridad, publicó La Jornada.
La información sobre la persona detenida y los heridos se la dio a este diario, Antonio Chávez, director de gobierno de Nuevo León.
Este reclusorio ha sido uno de los ‘focos rojos’ del gobierno estatal, luego de que en febrero de 2016 se registrara un motín que dejó 49 internos muertos.
“El Penal del Topo Chico tiene más de 80 años. Cumplió ya con su objetivo, dentro de dos años, a mediados del 2021 cuando se termine la construcción de estas 700 celdas, podremos cerrarlo”, dijo en rueda de prensa Manuel González, secretario general de Gobierno.
El funcionario adelantó que en junio de este año quedarán construidas 350 nuevas celdas en el reclusorio de Apodaca.
“Cuando eso suceda comenzaremos a trasladar a los reos hacia allá. En junio o agosto comenzara la construcción de las otras 350 celdas en el penal de Cadereyta y para finales de este gobierno cumpliremos con la certificación, renovación, despresurización y el control total de los penales del Estado”, explicó González.
En el Penal del Topo Chico había hasta ayer martes 26 de marzo, dos mil 990 reclusos, en el de Apodaca, mil 787; en el de Cadereyta mil 093 y en el Reclusorio Femenil de Escobedo 366 mujeres y 24 adolescentes, mencionó.
Actualmente, hay seis mil 569 reclusos, luego del traslado de más de 500 reos a los penales federales de Coahuila, y Morelos que se realizó durante la madrugada de este miércoles y ocasionó protestas de los familiares y una trifulca en el interior del Topo Chico.
En esta pelea entre internos, uno de ellos resultó muerto debido a un infarto, de acuerdo con las autoridades, mientras que otros 19 también fueron atendidos en hospitales locales al resultar con golpes y contusiones. Un celador resultó herido con un arma punzocortante, se informó a través de un comunicado del gobierno estatal.
“El interno identificado como Alberto G, de 40 años de edad, falleció la tarde de este miércoles mientras era atendido en el área médica del Centro de Prevención y Reinserción Social Topo Chico. Fue trasladado a la enfermería debido a que presentó taquicardia durante los disturbios de esta mañana en el mencionado centro penitenciario; sin embargo, mientras recibía la atención el interno sufrió un infarto y perdió la vida.
“Según su historial médico, Alberto G tenía antecedentes de afecciones y cirugías cardiacas. Alberto G había ingresado en el año 2014 por robo de vehículo”, señala el comunicado.
Los reos se pelearon por establecer el control entre ellos, luego de un reacomodo ordenado por las autoridades penitenciarias, informó el director de Gobierno, Antonio Chávez, quien acudió al penal a mediodía para explicar a los familiares la situación de los internos.
El secretario de Gobierno, Manuel González, comentó en rueda de prensa que la intención del traslado fue desarticular grupos delictivos que operaban desde el interior de los penales, así como aliviar el hacinamiento existente en los mismos.
La movilización comenzó desde la medianoche, tardó unas cuatro horas, y fue un operativo donde participaron militares, policías federales y estatales de Fuerza Civil.
Las acciones provocaron la protesta de familiares, que se prolongaron hasta la tarde, pues siguen esperando información sobre los internos y sus nuevas ubicaciones dentro del Topo Chico. Un grupo de ellos subieron a la fuerza a un camión de pasajeros para exigir que los llevara al hospital Universitario, a lo cual accedió el chofer de la unidad para evitar agresiones. (Fuente: La Jornada)