TABASCO, MX.- La Unidad de Policía Estatal de Género reportó un crecimiento en el número de casos atendidos de violencia contra mujeres al acumular más de 300 en lo que va del año, cuando en todo 2018 fueron 349, concentrándose la mayoría en los municipios de Centro (Villahermosa) y Nacajuca, publicó El Financiero.
La titular de la Unidad, Ana Julia Valencia Méndez, indicó que las colonias de Villahermosa donde se han atendido el mayor número de casos son La Manga, Gaviotas, Tamulté de las Barrancas, Buenavista y Anacleto Canabal, en tanto en Nacajuca, por la proximidad con la capital del estado, son Bosques de Saloya, La Selva y Pomoca.
Valencia Méndez comentó que la situación no es privativa de colonias populares, pues también ocurren en estratos sociales altos, aunque allí se han atendido sólo casos para orientación sobre ayuda y canalización de mujeres a terapia psicológica, pues no se atreven a denunciar.
A las mujeres que piden el apoyo, dijo, se les canaliza a la Fiscalía de Género para que procedan, si así lo deciden, a la denuncia y se les otorgan medidas de protección, así como acompañamiento con visitas aleatorias no sólo de la Unidad sino en coordinación con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Crean colectivo para apoyar a mujeres en riesgo
Bajo el lema “Aquí te protegemos #NoEstásSola”, organizaciones civiles, instituciones policíacas, universidades y cámaras empresariales, crearon un colectivo para ayudar a mujeres en situaciones de riesgo.
La secretaria general del comité “Aquí te Protegemos”, Brígida Alcocer Quiñones, expuso que se establecerá un protocolo de actuación en apoyo y se capacitará a personal de seguridad privada, que son los primeros que podrán dar atención a mujeres en riesgo.
Ante representantes de cámaras empresariales, universidades privadas, de la Fiscalía General del Estado (FGE), de la Policía Estatal de Género, de la Policía Federal y organizaciones civiles relacionadas con la defensa de las mujeres, expuso que la violencia y las adicciones son resultado de la ignorancia.
Por ello, dijo, se contempla educar desde el entorno familiar para generar una cultura de la igualdad de derechos, del respeto, la inclusión y la solidaridad.
La conexión con las autoridades, indicó, es importante para lograr que el arma de la educación contra la violencia impida que se manifiesten actitudes contra las mujeres.
Mencionó que entre la Policía Federal, la FGE, Observatorio Ciudadano y diversas organizaciones se buscó reavivar la flama que el año pasado se extendió entre hoteles, restaurantes, concesionarias de vehículos, cafeterías y otros negocios para ser refugio de ayuda a mujeres en riesgo. (Fuente: El Financiero)