Por Julio César Solís / Fotografía: Gonzalo Zapata

TULUM, MX.- El evento en este polo turístico del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se convirtió en una vendimia de artículos alusivos al mandatario federal, así como de alimentos y bebidas, que se sumaron a las porras hacia el Gobierno de la República.

Igualmente, las figuras políticas de Quintana Roo no gozaron de ‘privilegios’ en cuanto a la ubicación de sus asientos.

A la entrada de la Unidad Deportiva Tulum, comerciantes colocaron un ‘mercado de souvenirs’ que incluía camisetas, gorras, sombreros, tazas para café y sombrillas. Todos esos productos con el sello del político tabasqueño.

Incluso, peluches de AMLO se ofrecían a los asistentes al evento de presentación de los Programas Integrales de Desarrollo, Tren Maya, en Tulum.

En la fila de vendedores también se encontraban disponibles pozol frío -bebida originaria de Tabasco, estado natal de López Obrador-, tepache, además de tamales y empanadas.

A eso, se sumó un grupo de personas que con pancartas en las manos, vitorearon al jefe del Ejecutivo durante los 35 minutos que duró su intervención.

Los simpatizantes fueron colocados a los costados del escenario donde se desarrolló el evento.

Como en antaño, y aunque no se utilizaron detectores de metales y otros métodos de revisión, sí se colocaron vallas que delimitaron el acceso del propio presidente, así como de los invitados especiales y representantes de los medios de comunicación.

También, era notoria la presencia de elementos del ‘extinto’ Estado Mayor Presidencial (EMP), que mantuvieron la mirada fija en cualquier tipo de situación que pudiera ser atípica.

Marcada preferencia entre personajes de la política quintanarroense

A diferencia de los eventos que encabezaron presidentes como Vicente Fox Quesada, Felipe Calderón Hinojosa o Enrique Peña Nieto, en esta ocasión se marcó una diferencia entre los funcionarios de la política de Quintana Roo.

En el pasado, las figuras como presidentes municipales, diputados locales y federales, senadores e, incluso, líderes de partidos políticos, eran instalados en las primeras filas; justo frente al presidente de México.

Ahora, en Tulum, no ocurrió así.

Los alcaldes -a excepción del anfitrión Víctor Mas Tah- fueron colocados en el tercer bloque de cuatro en que se dividieron a los invitados.

En cambio, los tres senadores por Quintana Roo estuvieron en el presidium, además de dos de los diputados federales por la entidad.

En las dos primeras filas se encontraban personas de origen maya, adultos mayores, personas discapacitadas y jóvenes.

En la tercera se observó a los políticos.

La presidente de Benito Juárez, Mara Lezama Espinosa, así como los alcaldes Otoniel Segovia (Othón P. Blanco), Pedro Joaquín Delbouis (Cozumel), Juan Carrillo Soberanis (Isla Mujeres) y Nivardo Mena Villanueva (Lázaro Cárdenas), se sentaron en el tercer bloque.

En esa misma parte estuvieron diputados electos como Euterpe Gutiérrez Valasis y Erika Castillo Acosta, además de legisladores actuales como Gabriel Sauri Angulo, Fernando Zelaya Espinoza y Sonia López Cardiel.

Ahí, también estuvieron sentados juntos el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Jesús Alberto Capella Ibarra y el ex alcalde interino de Benito Juárez, Carlos Canabal Ruiz. (Noticaribe)