Agencia Reforma
CIUDAD DE MÉXICO, MX.- Pese a que en México se destinan cuantiosos recursos para retirar más de medio millón de toneladas de sargazo de las playas del Caribe, no hay indicios de que el problema se solucione pronto, señalaron expertos.
En el primer día de debates en el Encuentro de Alto Nivel Para la Atención de Sargazo en el Gran Caribe, recordaron que las alfombras flotantes de algas casi nunca llegaban a las playas alrededor de Cancún, pero a partir de 2011 afectan al turismo, pues los visitantes con frecuencia se enfrentan a montículos de sargazo maloliente en las costas.
De acuerdo con agencias, se destacó que los primeros informes indicaban que el sargazo llegaba de un área del Atlántico en la costa norte de Brasil, cerca de la desembocadura del río Amazonas.
Sin embargo, expertos como el oceanógrafo Donald R. Johnson, señalan que al parecer que hay otros factores, como flujos de nutrientes del río Congo.
El ascenso de agua profunda cargada de nutrientes en el Atlántico tropical y polvo proveniente de África, también podrían contribuir, dijo Johnson, investigador en el Laboratorio para la Investigación de la Costa del Golfo de la Universidad del Sur de Mississippi.
Aunque a veces parece que las alfombras de sargazo flotan hacia el oeste con rumbo al Caribe, los expertos dicen que en realidad parecen ir y venir entre el Caribe y África.
En ese sentido, síndico que el sargazo no es sólo un problema para México, también afecta, en mayor o menor grado, a todas las islas del Caribe.
“Vemos un gran impacto en nuestros países, económica y socialmente. Ahora están siendo consideradas emergencias nacionales”, dijo June Soomer, secretaria general de la Asociación de Estados del Caribe.
Al inaugurar el encuentro, el Gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, planteó que el gran reto para sacar provecho a los grandes volúmenes de sargazo que llegan a esas costas es industrializarlo.
“El siguiente paso y gran reto es la industrialización del mismo, de forma tal que permita aprovechar los grandes volúmenes y que al mismo tiempo permita reducir los altos costos de contención y remoción”, dijo. (Agencia Reforma)
