Por Gabriel Alcocer
CANCUN, MX.-Después de recibir un disparo en la cabeza de manera circunstancial, una niña, de tan solo nueve años de edad, fue llevada al Hospital General por sus propios padres, poco antes de la medianoche del miércoles y permanece internada en estado crítico, después de algunos reportes preliminares que señalaban su aparente deceso.
El ataque a balazos que dejó como daño colateral dos lesionados, una niña con un disparo en la cabeza y un taquero con una herida en el pie derecho, se registró alrededor de las 23:20 horas, en la colonia La Invasión, en la Región 234 y hasta el mediodía de este jueves se indicó que la menor se debatía entre la vida y la muerte en el hospital.
Las primeras investigaciones señalaron que los disparos fueron realizados por dos sujetos que viajaban en una motocicleta, quienes estaban en persecución de un taxi y dispararon en múltiples ocasiones, mientras circulaban en dos calles de la colonia La Invasión.
Uno de los proyectiles lesionó en el pie derecho a un taquero, Mario Feliciano P. C., de 55 años, mientras una de las balas impactó la cabeza de la niña, Melani Madai I. A., de nueve años, quien se encontraba en el interior de su domicilio construido de madera.
La madre de la menor, Rosario I. A., de 34 años, dijo a los policías que notaron la persecución que realizaban dos sujetos en una motocicleta y al abrir la puerta para ver que sucedía, surgieron los disparos y después vio que su hija estaba desmayada y tenía una lesión en la cabeza.
El padre de la niña la cargó en sus brazos y corrió hacia una calle, donde recibió la ayuda de un vehículo particular para su traslado al Hospital General. En medio de momentos de confusión, se reportó momentos después la supuesta muerte de la niña, debido a la gravedad de su lesión, pero posteriormente se estableció que continúa internada en estado crítico.
En tanto, el taquero fue trasladado en una ambulancia de la Cruz Roja al Hospital General.
Los peritos de la Fiscalía General del Estado encontraron un total de siete casquillos, calibre 9 milímetros, los cuales estaban esparcidos a lo largo de un camino de terracería y de una calle de la colonia La Invasión, hasta llegar a la esquina con la avenida Costa Maya, como evidencia de la persecución a balazos. (Noticaribe)
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