PLAYA DEL CARMEN, MX.- El miedo tiene distintas formas de expresarse: un gesto, una mirada baja o huidiza o también el decir que no se sabe nada ni vio nada. Es la colonia La Guadalupana a las tres de la tarde. Es ‘El Fogonazo’ y es el homicidio de Gonzalo. Las nubes negras amenazan lluvia vespertina.
Las farolas del negocio permanecen encendidas. Dos veladoras apagadas reposan en el piso. A unos metros se puede leer que Andrés Manuel López Obrador combatió la tranza en el sargazo. Y también a unos metros, una chica alcanzó a contar cinco disparos.
Un leve encogimiento de hombros es la respuesta de los vecinos, quienes ya no tomarán sus chelas ni pedirán el consomé para combatir la cruda. Tampoco comprarán el camarón que se vendía a 215 pesos el kilo.
“Aquí murió, Má”, le dice un adolescente a su mamá al pasar por el lugar. Quizá conocieron a Gonzalo en su época de disc jockey en el Blue Parrot. Quizá no. Nadie sabe.
Un letrero en el que se solicita mesero redactado en una cartulina continúa en el lugar. Dicen los transeúntes que la policía vino y se fue. Al lado, el repartidor de garrafones de agua baja dos. Unas colegialas compraron frutas en la tienda de la esquina.
Dentro están las sillas con sus mesas, pero nadie vigila. Nadie la pronuncia en forma literal, pero el mensaje es “tenemos miedo”. (Noticaribe)
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