Por Julio César Solís
CANCÚN, MX.- El espontáneo que brincó al ruedo durante la corrida de toros el pasado viernes no era activista antitaurino y únicamente se encontraba pasado de copas, lo que motivó que irrumpiera en plena fiesta brava.
Durante la fiesta taurina, el hombre intentó torear a ‘Arquitecto’, de 510 kilogramos de peso, el primer astado de la noche, el cual lo tumbó sin mayores problemas. y que posteriormente fue dominado por el rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza.
De acuerdo con una versión oficial, el sujeto, que no proporcionó sus datos generales, presentó un golpe a la altura del pecho, sin fractura o daño de consideración más que la contusión.
Y según el reporte médico, el individuo estaba alcoholizado en segundo grado, lo que originó que se negara a ser atendido por la enfermería de la Plaza de Toros Cancún.
“Se encuentra en estado etílico y se negó a la atención en la enfermería de la plaza solo permitió una revisión en el callejón y se retiró por su propio pie”, señaló la información.
Finalmente, el aficionado se retiró de la Plaza sin que la situación pasara a mayores. (Noticaribe)