Que los predios de los proyectos Grand Island Cancún y Riu Riviera Cancún se han convertido en campos de batalla entre el titular de la Secretaría de Turismo (Sectur), Miguel Torruco, y el director general del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons.
Y es que Torruco está dale y dale que los proyectos son viables y vienen a ampliar la oferta turística de Cancún.
En cambio, Jiménez Pons esgrime que los proyectos no solo significan más de lo mismo de un modelo depredador de Cancún, sino que comprometen la viabilidad urbana de la Zona Hotelera.
Además, en Fonatur se sospecha que los proyectos han dejado una larga estela de corrupción.
El enfrentamiento es de pronóstico reservado, pero quizá el resultado sea un salomónico: empate a uno.
