CHIAPAS, MX.- Tras la revuelta de la madrugada del jueves, médicos, enfermeras, residentes, pasantes y todo el personal de la Clínica IMSS-Bienestar y del Centro de Salud de Venustiano Carranza abandonaron ese pueblo y cerraron los servicios ante el temor de ser agredidos, publicó Proceso.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) confirmó que si bien no se agredió físicamente al personal médico, éste sí se refugió y tuvo temor de sufrir un ataque, luego de que la turba destruyó una clínica móvil estacionada afuera de la clínica.
Una médico, una enfermera, al menos siete residentes y dos pasantes dejaron la Clínica del IMSS, y se trasladaron a Tuxtla Gutiérrez. Cuatro pacientes adultos con COVID-19, un niño más infectado por este virus, y otros pacientes fueron llevados a la capital del estado también.
En el lugar sólo quedó un guardia y otros empleados que son de Venustiano Carranza. El resto huyó ante la falta de seguridad.
El Ayuntamiento confirmó que el Centro de Salud está cerrado, y por ahora “ningún medico quiere llegar, todos se fueron”. Y que están esperando que baje la tensión en el municipio para que retorne el personal médico.
El sindicato apoyó a sus trabajadores. Se informó que el día martes les definen el regreso a Venustiano Carranza. Por ahora la Guardia Nacional custodia el IMSS y el Centro de Salud.
Personal del municipio confirmó que la unidad móvil fue dañada pero no incendiada. Los inconformes no entraron a la clínica que también está cerrada.
“No entraron los de la turba. Personal médico mejor se fue del lugar. El lunes reanudan en la clínica”, dijo una fuente del Ayuntamiento.
La revuelta fue porque un grupo de habitantes de Venustiano Carranza se opuso a una fumigación para sanitizar el pueblo esa noche. Los inconformes aseguraron que el COVID-19 no existe y que es el gobierno el que los está matando con drones que rocían un polvo blanco, llamado Paraquat, un herbicida que usan los campesinos en el campo.
CASA POR CASA, RECUPERAN LO ROBADO
Motocicletas, pantallas, refrigeradores, lavadoras, estufas y otros artículos saqueados de una tienda Elektra durante la revuelta del miércoles pasado se han ido recuperando poco a poco y recogiendo de casa en casa, informó a Fiscalía General del Estado (FGE).
Durante su intervención en la Mesa de Seguridad Estatal de hoy, el fiscal Jorge Llaven Abarca dio a conocer los avances de las diligencias desahogadas con motivo de los hechos violentos ocurridos la noche del miércoles y las primeras horas del jueves, en el municipio de Venustiano Carranza.
Destacó la participación de la ciudadanía al hacer uso del número 911 para aportar datos de prueba a la autoridad y que además está coadyuvando en las investigaciones para ubicar a los responsables “de estos actos de barbarie”.
El responsable de la procuración de justicia en Chiapas dijo que, desde ayer mismo, la población comenzó a entregar a la Fiscalía los objetos que fueron sustraídos de una tienda departamental. (Fuente: Proceso)
