CIUDAD DE MÉXICO, MX.- El comandante de la Policía de Investigación (PDI) Juan Tomás Rangel estaba a muy poco de jubilarse tras más de 30 años en la corporación, su último día sería el próximo martes, pero ahora está preso. La Fiscalía de Justicia de la Ciudad lo encarceló ayer por la mañana en el Reclusorio Sur, acusado de secuestro exprés agravado, publicó c4noticiasmx.com.
Juan Tomás Rangel era conocido en la Policía como La Chilaca. Desde 1995 obtuvo el cargo de comandante en la entonces Policía Judicial. Estuvo al frente de las Fiscalías de Venustiano Carranza, Xochimilco y Tláhuac.
En el año 2007, adscrito a la Fiscalía de Tláhuac, se le ligó con el cártel de Los Hermanos Beltrán Leyva.
En las filas de la Policía se aseguraba que ayudaba al grupo delictivo a ubicar puntos para abandonar cadáveres de sus rivales. Era él quien investigaba esos homicidios, y así propiciaba que los casos nunca avanzaran.
Además, lo señalaban por “escoltar” a miembros de Los Beltrán que trasladaban cargamentos de droga desde Morelos a la Ciudad de México. Supuestamente lo hacía con patrullas y con el apoyo de otros elementos de la corporación.
Entonces, se dijo que él y los mandos que lo apoyaban recibían pagos de 5 mil dólares mensuales, que les entregaban en la zona de Perisur. Su nombre, incluso, apareció en una “narco-nómina” hallada en una casa que las autoridades federales encontraron en El Pedregal.
Pero todas estas acusaciones nunca avanzaron. Rangel Balderas continuó en las filas de la corporación sin mayores problemas.
Sin embargo, el año pasado se puso en la mira de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y de sus mandos en la Policía de Investigación (PDI).
Era el encargado de la Coordinación Territorial Cuauhtémoc 3, en específico de investigar los delitos sucedidos en el barrio de Tepito.
En ese entonces, el jefe de La Unión en el Barrio Bravo y uno de los delincuentes más buscados, era Oscar Andrés Flores, El Lunares.
Y ahí, en Tepito, Tomás Rangel fue captado por una cámara de la Ciudad mientras platicaba y hasta se abrazaba con Carlos Iván Monroy Fuentes, conocido como “El Santero” de El Lunares o El Gordo Pepa.
Ese hombre era señalado por las autoridades como el encargado de pagar sobornos a los elementos policiacos que les daban protección.
El equipo de inteligencia de la SSC logró captarlos mientras conversaban en la calle de Peralvillo, donde El Lunares tenía su centro de operaciones. Desde entonces se abrió la indagatoria en su contra. Lo quitaron del área y lo enviaron a Tlalpan, luego a Seguridad Técnica.
Hace un par de meses, Rangel Balderas comenzó a tramitar su jubilación. Recabó papeles y firmas para dejar la corporación de manera definitiva.
La semana pasada la Fiscalía General de la República (FGR) acudió a la Fiscalía capitalina para pedir datos sobre sus movimientos. Sus bitácoras y registros de GPS de su patrulla.
Ayer, fue detenido.
Las autoridades revelaron que además de ligarlo con La Unión, lo acusaban de apoyar ahora a Julio César Ramos Sánchez conocido como Julio Rico líder de la unión de comerciantes, acusado de extorsiones y secuestros.
El próximo martes sería su último día de trabajo. Ayer lo llevaron al Reclusorio Oriente y más tarde fue traslado al Sur.
El retiro de La Chilaca será distinto de como lo planeó. (Fuente: c4noticiasmx.com)