Cancún.- A cinco días de iniciadas las obras de rehabilitación del bulevar Colosio, varias de las seis vías que fueron ofrecidas por autoridades como alternativas para evitar el congestionamiento vial, han resultado ser poco funcionales y peligrosas, debido, principalmente, al mal estado en que se encuentran.
Esta situación ha generado gran molestia en los automovilistas, pues señalan que la avenida 135, por ejemplo, no es viable como vía alterna, pues actualmente solo tiene habilitado un carril en un tramo, ya que está siendo repavimentada.
Aunado a ello, no hay personal de Tránsito para supervisar el flujo vial en esta avenida, lo que permite que ingresen unidades pesadas (como camiones y tráileres), que bloquean y aletargan aún más la circulación en la zona.
Lo mismo ocurre en las calles Álamos, Sierra Madre, Nazaret, Chapultepec, y en las avenidas Colegios y Olivos, las cuales, a pesar de su pésimo estado, son congestionadas por largas filas de automóviles que intentan llegar a una avenida Huayacán, mismo que también padece de tráfico lento y constantes embotellamientos.
En un recorrido por dicha zona, automovilistas entrevistados señalaron que dichas vialidades ya no deben ser ofrecidas como vías alternas, ya que en realidad están lejos de ser funcionales y, a su vez, se han convertido en arterias incluso más congestionadas que el propio bulevar Colosio.
Ante este caos vehicular, para muchos automovilistas les ha resultado más factible el hecho de ir hasta la Leona Vicario, para salir por la Ruta de los Cenotes, a fin de llegar pronto a sus centros de trabajo en la Riviera Maya. (AGENCIA SIM)