CHIHUAHUA, MX.- El exgobernador de Chihuahua, César Duarte Jáquez, sufrió un infarto la noche del pasado martes en la celda que ocupa al interior del Centro de Reinserción Social (Cereso) No. 1 de Aquiles Serdán, publicó El Financiero.
Su representante legal, Juan Carlos Mendoza Luján, dio a conocer a que el padecimiento se confirmó apenas esta mañana tras ser valorado por un médico particular.
“Pasó una hemorragia que no se advirtió como tal el martes en la noche. Hoy acudió a un hospital por los malestares propios de la sintomatología, donde fue revisado y se confirmó que tuvo un infarto”, añadió el abogado.
Indicó que por lo pronto su estado de salud es eventualmente estable, pero “con riesgo real de quedar comprometida dicha estabilidad”.
Tiempo atrás le fue detectada al exmandatario una insuficiencia cardiaca en una de las paredes del corazón, la cual, según Mendoza Luján, está muy comprometida, pues ya presenta incluso tejido necrosado.
Por lo pronto, Duarte Jáquez recibe atención médica al interior del penal, apegada a los protocolos que exige este tipo de padecimientos y esperan a que un juez de ejecución de penas apruebe la solicitud para que sea atendido en un hospital.
Hace un par de días, el exfuncionario, en una carta abierta distribuida por su equipo de abogados, exigió a las autoridades judiciales celeridad al proceso penal que se sigue en su contra, pues a días de cumplir 3 años privado de su libertad, afirmó, se ha convertido en un “botín, para un muy cuestionable interés político”.
“¿En qué momento el Poder Judicial del Estado olvidó que en ningún caso una persona puede estar privada de su libertad sin una sentencia condenatoria por más de dos años?”, cuestionó Duarte en la misiva.
César Duarte fue ingresado al Cereso de Chihuahua el 2 de junio del año pasado, luego de ser extraditado por las autoridades de Estados Unidos, por acusaciones relacionadas con los delitos de peculado y asociación delictuosa, por el presunto desvío de 96.6 millones de pesos del erario estatal. (Fuente: El Financiero)